Hilton llegó este viernes a Venecia para acudir a la presentación oficial del filme «Bad Lieutenant: Port of call New Orleans», película del director alemán Werner Herzog que no ha convencido a la crítica de la Mostra y que está protagonizada por Mendes y el estadounidense Nicholas Cage.
La primogénita del propietario del imperio hotelero Hilton llegó en compañía de su novio, Doug Reinhardt, jugador de béisbol estadounidense y quien no se separó de Paris en los actos a los que la pareja, recién reconciliada, ha acudido hasta el momento.
Ya fuera de toda pompa oficial, pero también presente en el Lido de Venecia, D’Addario hizo acto de presencia ayer, atrayendo las miradas y los flashes de profesionales y aficionados que deambulan estos días por el paseo marítimo de la isla veneciana.
La italiana, la primera en hablar públicamente sobre su participación en las fiestas con jovencitas del primer ministro de Italia, se dejó ver en el exclusivo Hotel Excelsior, sede estos días de entrevistas y reuniones del mundo del cine y que dista escasos 200 metros del lugar en el que se proyectan las películas.
La presencia de éstos y otros personajes ha llevado a que la prensa italiana se pregunte qué ocurre con la Mostra de este año y si el Festival de Venecia, uno de los más prestigiosos de la escena cinematográfica internacional, está cayendo en lo «cutre».
Esta idea no es descabellada si se piensa que, hasta el momento, los nombres más importantes y glamourosos que han pisado la alfombra roja veneciana han sido los de Eva Mendes, que destacó en la ceremonia de apertura con un traje rojo con estampado de leopardo, Nicholas Cage y el también estadounidense Viggo Mortensen.
Precisamente para la presentación de la película de Mortensen, «The Road» estaba previsto que viajara hasta Venecia su compañera de reparto Charlize Theron, una presencia que finalmente no se ha producido.
Por el momento, la organización de la Mostra mantiene la respiración, después de que hoy llegara ya el cineasta estadounidense George Lucas, que acude por primera vez al festival para entregar un premio, y a la espera del desembarco de su compatriota George Clooney, el rostro más esperado.
Todo con la intención de salvar un festival cuya ceremonia de apertura no fue retransmitida en directo ni siquiera en Italia y que ya en la alfombra roja en su primer día, con la presencia de famosos nacionales como el hijo de Berlusconi Piersilvio o la presentadora de televisión Simona Ventura, dio muestras de que todo puede quedar en casa.
Eso si finalmente el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, decide no personarse en la Ciudad de los Canales, después de que en un comunicado de prensa el mandatario afirmara que se está planteando acudir al estreno del documental que trata sobre su figura, «South of the border», del estadounidense Oliver Stone y que se presentará el próximo lunes.