Fuentes de la diplomacia israelí aseguraron que el resultado del texto «no supone una decepción, porque no había expectativas», dado el «claro desequilibrio» del mandato. «Al no investigar lo sucedido antes del ataque, sólo analiza la respuesta», lamentaron las fuentes, bajo condición de anonimato, en alusión a los 23 días de ofensiva «Plomo Fundido», que dejaron unos 1.400 palestinos muertos, en su mayoría civiles y más de un quinto de ellos menores, según recuentos hospitalarios locales y de ONG israelíes, palestinas e internacionales.
En su nota, el Ministerio de Exteriores insiste en que «tanto el mandato de la misión como la resolución que lo creó prejuzgaban el resultado de la investigación, daban legitimidad a la organización terrorista Hamás y pasaban por alto la deliberada estrategia de Hamas de usar civiles palestinos como escudo para lanzar ataques terroristas».
600 páginas
El documento, de casi seiscientas páginas, fue presentado en la sede de Naciones Unidas en Nueva York por Goldstone tras meses de pesquisas. «La misión ha concluido que las acciones que se llevaron a cabo constituyen crímenes de guerra y posiblemente crímenes contra la humanidad», aseguró el jurista en la presentación.