«Defiendo la necesidad de que exista cine bueno y malo, porque de lo mucho nace lo bueno», subrayó, afirmando que le molesta que se hable del cine español «como género» porque es «reductor». Lo que le causa tristeza es mirar la cartelera y que no haya ningún título que le apetezca ir a ver.
Trueba dijo que no mira el pasaporte de las películas y que habría que recomendar al público lo mismo y no sólo decirle que vaya a ver cine español. Apostó porque se vea «buen cine» y no únicamente filmes de Hollywood de los que «la mayoría son basura» aunque también hagan «joyas». «Hago cine porque vi películas que me conmovieron, no por su nacionalidad», aseveró.
SUBVENCIONES
El director consideró necesario que el público esté «abierto» a todos las propuestas y se quejó de que se haya puesto a la opinión pública «en contra» de su cine. «Nos están dando todo el rato», aseguró, agregando que, en el tema de las subvenciones, el cinematográfico es el sector que recibe «la porción más pequeña». «¡Qué paciencia tenemos que tener!».
Trueba, quien no está metido de lleno en las conversaciones con el ICAA relacionadas con la Orden ministerial que desarrollará la Ley del Cine, argumentó que está con mucho trabajo, ya que además del cine está muy metido en su sello discográfico y en la restauración de alguna de sus películas, como ‘Belle Epoque’. También tiene en proyecto el guión de ‘El artista y la modelo’, una historia sobre los años 40 en al que podría estar Aida Folch.
SENTIMIENTOS DESBOCADOS
Respecto a ‘El baile de la Victoria, una historia de «sentimientos desbocados, romántica pero en un escenario real», que es además una de las cintas preseleccionada para ser candidata española al Oscar, Trueba recordó que la ha escrito junto a Jonás Trueba. Es la primera vez que se da un mano a mano entre padre e hijo.
Basada en la novela del chileno Antonio Skármeta (con la que éste ganó en 2003 el Premio Planeta -el autor también revisó el texto final de la película-) Trueba dijo que se interesó por llevar a la gran pantalla esta obra mientras la leía. Se enamoró del proyecto y de los tres personajes protagonistas: Vergara Grey (Ricardo Darín), Ángel Santiago (Abel Ayala) y Victoria Ponce (Miranda Bodenhöfer).
La película, ambientada en Chile, justo cuando el país estrena democracia, narra la historia de Vergara Grey, un famoso ladrón de cajas fuertes que se beneficia de la amnistía general, al igual que el joven Ángel, quien sueña con vengarse del alcaide de la prisión y con dar un gran golpe para el que necesita la ayuda de Vergara Grey. La joven Victoria, una chica muda huérfana, que encuentra en el baile clásico una forma de expresarse, se cruzará en el camino de Ángel y éste se enamorará de ella.
Pese a que esta historia podría situarse en cualquier país, Trueba quiso que fuera Chile para conservar la geografía del libro de Skármeta. Y también quiso que Darín, con quien el ganador de un Oscar por ‘Belle Epoque’ quería trabajar desde hace tiempo, fuera el protagonista. Para ello modificó un poco la historia de la novela e hizo «un traje a medida» para el actor: Vergara Grey sería un ladrón argentino.
DARÍN, EL MEJOR
«Me encantaría que Darín se llevara la Concha al mejor actor en el festival. Es un súper actor», dijo, agregando que si alguien se merece ese galardón es el intérprete argentino (que también participa en el Festival con la película de Campanella, ‘El secreto de sus ojos’).
Director y actor se llevaron genial durante el rodaje. «Es una máquina de buen rollo», señaló sobre el gran sentido del humor que posee el actor. Trueba agregó que le gustaría hacer una comedia con él.
Otra modificación de personajes: si bien el papel de Ángel no se modificó, el de Victoria es una «total recreación». En ‘El baile de la Victoria’, que se estrena el próximo 4 de diciembre también están una «cómplice habitual» de Trueba, su cuñada Ariadna Gil y la ya retirada bailarina brasileña Marcia Haydée. El mismísimo Skármeta tiene un pequeño papel en el filme.