Otros 20 Estados miembros -entre ellos Francia, Alemania, Italia, y Portugal-, también recibieron este jueves un aviso comunitario por no aplicar de forma adecuada la legislación.
El Ejecutivo comunitario ya había emprendido acciones contra 24 países en 2008, pero varios de ellos tomaron las medidas necesarias para adaptar sus normativas a la comunitaria.
Sin embargo, más de un año después «la mayoría de los Estados miembros sigue sin cumplir plenamente las directivas comunitarias», subrayó la CE.
Entre las deficiencias detectadas por Bruselas, destaca la falta de independencia de los administradores de infraestructura respecto a los operadores ferroviarios, así como la incorrecta aplicación del sistema de tarifas de acceso a las vías.
La CE señala, por otro lado, la falta de un régimen de prestaciones para mejorar el rendimiento de la red ferroviaria, de incentivos del administrador de la infraestructura para reducir costes y la ausencia de tarifas basadas en los costes directos de los servicios ferroviarios.
Asimismo, llama a la creación de un organismo regulador independiente con poderes para resolver los problemas de competencia en el sector ferroviario.
El primer paquete ferroviario fue aprobado en 2001 y exige a todos los países de la UE que garanticen el derecho de acceso de los servicios internacionales de ferrocarriles a la Red Transeuropea de Transportes (TEN-T).