No obstante, el juez ha confirmado la improcedencia de la suspensión en un auto con fecha de 21 de septiembre, al que tuvo acceso Europa Press. Fuentes jurídicas explicaron que se deniega la solicitud al entender que en este caso rige la norma específica reguladora de las garantías financieras.
Según el auto, Unión de Capitales presentó la solicitud de concurso voluntario en junio de 2009, cuando ya existían «diversos incumplimientos en contratos de financiación que incluían garantías financieras», por lo que la sociedad «debía conocer el riesgo o al menos la posibilidad cierta derivada de la ejecución de los valores que posee y que habían sido pignorados».
Garantías ya ejecutadas
Además, se advierte de que «parece ser» que las garantías cuya liquidación se pretendía suspender ya se han ejecutado, por lo que «resulta obvio concluir que habiéndose ya liquidado las garantías carece de sentido la suspensión cautelar de esa liquidación que ya se ha llevado a efecto».
Fuentes jurídicas informaron a Europa Press de que Jaime Salazar realizó una petición similar a la de su hermano a través de Alván, aunque posteriormente desistió.
Los hermanos Salazar, que en el momento en que fueron cesados como presidente y vicepresidente de SOS controlaban un 17,68% y un 10,54% del capital de la compañía, han reducido su participación tras la ejecución, por parte de diversas entidades bancarias, de acciones aportadas en garantía por sus sociedades.
Entre otras, han ejecutado garantías pignoraticias Ahorro Corporación, UBS Bank, Banco Espírito Santo y un sindicato bancario formado por trece entidades, con Commerzbank como agente.
Los Salazar fueron destituidos el pasado 30 de abril como ejecutivos de la multinacional y denunciados por la compañía ante la Audiencia Nacional por un supuesto desvío de 230 millones de euros a sociedades vinculadas a ambos con cargo a la tesorería de SOS.