Preguntado si veía probabilidades de éxito de las conversaciones en curso en Madrid, el ministro declaró que «por supuesto que sí, naturalmente que sí».
En Zaragoza los representantes del Gobierno central y del aragonés prosiguen las negociaciones sobre el futuro de la factoría de Figueruelas con delegados del consorcio Magna y los sindicatos.
El ministro español de Industria, Miguel Sebastián, y el consejero delegado de Magna, Siegfried Wolf, no participan en la ronda, de la que han trascendido pocos detalles, salvo unas declaraciones del secretario general del sindicato Comisiones Obreras (CCOO), Ignacio Fernández Toxo.
Toxo señaló que «es posible el acuerdo, aunque todavía estamos lejos del mismo».
España ha condicionado su participación en los 4.500 millones de euros en ayudas al nuevo Opel prometidos por el Gobierno alemán a un plan de viabilidad a lago plazo.
También en la sede de Opel, en Rüsselsheim (centro de Alemania), prosiguen las negociaciones entre GM, Magna y los sindicatos sobre el futuro grado de representación de la plantilla en la nueva empresa.
El presidente del comité de empresa de Opel, Flaus Franz, negó sin embargo que uno de los puntos en la agenda sea la obtención de un sillón adicional en el órgano de vigilancia de la misma.
«Eso es falso. Esa exigencia nunca la hemos planteado y en consecuencia no forma parte de las negociaciones», dijo Franz.
Según el acuerdo alcanzado por GM y pendiente de firma este jueves, GM venderá el 55% del capital de Opel al consorcio formado por Magna y Sberbank, el 10% lo asumirá la plantilla y el 35% restante seguirá en manos de la antigua empresa matriz estadounidense.