La plazoleta de entrada a la sede de los populares valencianas estaba «tomada» por los periodistas desde una hora antes, con la intención de obtener declaraciones de alguno de los protagonistas de esta reunión, anunciada desde el pasado viernes pero que hoy, con la negativa de Costa a dimitir, como propone la dirección del partido, ha adquirido aún más tensión política.
El primero en llegar ha sido el vicepresidente de la Diputación de Castellón, Francisco Martínez, sobre las 17.25 horas, a quien ha seguido el diputado por esta provincia y hermano del aún secretario regional, el ex ministro Juan Costa, acompañado por la secretaria de Comunicación del PPCV, Marta Torrado.
El ex ministro ha agradecido el interés de los medios por conocer su opinión previa a este Comité, pero ha señalado que no iba a hacer ninguna declaración porque «las explicaciones y los comentarios» corresponden esta tarde «al secretario regional y al presidente».
Después han llegado, entre otros, la portavoz del Gobierno valenciano, Paula Sánchez de León, el ex alcalde de Benidorm Manuel Pérez Fenoll, y los vicepresidentes primero y tercero del Gobierno valenciano, Vicente Rambla y Juan Cotino, respectivamente.
Cotino se ha limitado a señalar a los periodistas que tiene «cosas mejores que hacer» cuando se le ha preguntado si había escuchado la declaración realizada esta mañana por Costa.
Posteriormente han llegado el vicesecretario de Organización del PPCV, David Serra, el vicepresidente segundo del Gobierno valenciano, Gerardo Camps, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, el diputado por Alicante Federico Trillo, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el presidente provincial del PP de Castellón, Carlos Fabra, quien ha manifestado que él «siempre» ha apoyado a Ricardo Costa.
La reunión de esta tarde, a la que están convocados sus 94 miembros y que no se celebraba desde el pasado 7 de enero, verá también los informes de gestión de Costa y Camps, antes de dar paso al turno de ruegos y preguntas.
Los fotógrafos no han sido autorizados a tomar imágenes del inicio de la reunión, como inicialmente se había anunciado, y se les ha emplazado para el final de la misma.