Velarde cree que «lo primero» que hay que hacer es «decir cómo están las cosas de verdad, de forma rigurosa e indiscutible» y, después, tomar medidas pero «conjuntamente» y de forma urgente, tanto las que van a rendir a corto plazo como las que lo harán a largo plazo.
Para ello, cree conveniente, «para empezar», prorrogar los Presupuestos Generales del Estado como una forma de contener el gasto y aplicar medidas para conseguir un cambio en el abastecimiento energético, apostando por energías «baratas, abundantes y de buena calidad», como la nuclear.
La gran mayoría de las medidas adoptadas por el Gobierno contra la crisis son, según Velarde, «mediditas» que se colocan «en el terreno de los arbitrios» porque se toman de manera «desarticulada» y sin mirar «las consecuencias».
Da la «sensación», ha añadido, de que el Gobierno «no comparte» la opinión de la mayoría de los economistas de este país.
Se requiere un cambio profundo, según Velarde, en la mayoría de los sectores productivos, especialmente en el público para seguir garantizando la cobertura del Estado del bienestar y para que las instituciones económicas funcionen realmente bien.
Velarde, Premio Rey Juan Carlos de Economía en 2002, ha agregado, respecto al sector servicios, que es «una tontería» decir que hay que convertir a España en un país de servicios si no se cuenta con una base «real» en el sector industrial, que requiere además que se incremente la inversión en I+D+i (investigación, desarrollo e innovación).