«A propuesta mía, pedí a los miembros de la Junta tratar el tema de Joan Oliver, pero mis compañeros, de manera unánime, declinaron la opción de reabrir el asunto y ratificaron la labor que está haciendo», aseguró Laporta en su comparecencia ante los medios de comunicación, tras dar por «cerrado» un tema que pasó «hace seis meses», el de los vicepresidentes espiados.
Sobre el aumento de sueldo de Oliver, Laporta desveló que en los últimos tres meses no se le ha aumentado, aunque sí que se hizo antes.
«La función de Oliver es muy importante para nuestro proyecto. Creo que está haciendo un muy buen trabajo y que lo está demostrando. En año de crisis, el Barça ha vuelto a dar beneficios», señaló el máximo dirigente del club.
Laporta explicó que, dado este buen rendimiento, «se habló de que merecía tener un sueldo en consonancia con la importancia de su rol», que se traduce en la mejora de contrato que obtuvo el director general, que fija su sueldo en 600.000 euros más variables.
Laporta pide «tranquilidad»
El presidente azulgrana reclamó «tranquilidad» para poder afrontar la gestión del club, tras unas semanas con escándalos.
«Pido tranquilidad en el entorno para que todos podamos remar en la misma dirección y el Barça continúe en este contexto», destacó Laporta.
Además, Laporta negó que se haya tratado en la reunión de este viernes la posible candidatura continuista que salga de la actual junta directiva con vistas a las elecciones del próximo año.
«No se ha hablado de nada de esto porque tenemos claro que tenemos que centrar nuestra acción en gobernar, que tenemos la sensación que puede ser otro gran año para el barcelonismo», proclamó el presidente.
Por otro lado, Laporta aseguró que el club ha cobrado ya la deuda de 31’5 millones de euros de Audiovisual Sport, aunque lamentó el retraso en el pago.