A un día para que los PGE para el 2010 pasen el primer trámite en el Congreso, Iranzo echa la vista atrás hacia las cuentas actuales del 2009, en lo que considera «el peor presupuesto de la democracia». Iranzo recuerda que estaban sustentados sobre unas previsiones macroeconómicas que no se han podido cumplir ni de lejos.
En el lado de los ingresos, que para Iranzo están sobreestimados, Iranzo ha advertido de que la subida de impuestos en un error que, además, compromete el crecimiento económico y retrasa el ajuste necesario.
A su juicio, se hace necesaria una revisión generalizada de la fiscalidad empresarial, con las cotizaciones sociales y el Impuesto de Sociedades. Y en este sentido, considera que la reducción aprobada para las empresas más pequeñas «va contra el crecimiento de las empresas», al penalizar a las compañiás de mayor tamaño.
En cuanto a la subida del IVA, Iranzo alerta de que será un sacrificio para las familias y deprimirá aún más la inversión y el empleo. De hecho, creen que el consumo seguirá bajo mínimos una vez que el uno de julio se acometa esta subida.
Pero estos mayores ingresos seguirán sin embargo sin frenar el elevado déficit fiscal, que alcanzará el 10% en el 2010 y que se debe a «decisiones estructurales del pasado.»
Y por el lado de los gastos, al margen de la infraestimación de ciertos gastos comprometidos, el informe del IEE denuncia que el gasto comprometido sigue increméntandose aún más año a año, lo que ahora mismo «hipoteca la economía española». Para ello apuesta por una reforma del sistema de las pensiones y de la Seguridad Social. Si estos cambios no se produjesen, España se colocará «en el furgón de cola de Europa».
Además, denuncia el descenso del 11,9% en el presupuesto destinado a la inversión pública, al tiempo que Iranzo recuerda que «inversión no es hacer aceras».
Al margen de la contracción del gasto en esta partida, Izquierdo tiene la impresión de que «el Gobierno se conforma con que el gasto público no crezca», lo que hará que se pierda un año en la lucha por llegar al 2012 con un déficit inferior al 3%. Sin embargo, recuerda que siemrpe «las recuperaciones se trabajan y se preparan, no llegan como una lluvia de verano».
El déficit fiscal es una de las patas que cojean en la economía española, junto a la crisis financiera, la situación del mercado inmobiliario y el elevado endeudamiento de familias y empresas.
Al mismo tiempo, recuerda que España sigue perdiendo competitividad, y en esta situación ya no es posible devaluar la moneda. Precisamente, Iranzo considera que la pertenencia al euro es una cuestión «básica para nuestra sostenibilidad».
Aunque tanto Iranzo como Izquierdo han descartado la posibilidad de que estemos en deflación, Iranzo ha asegurado que la mayor preocupación actual es el paro, cuya tasa alcanzará el 20% a finales del 2010, con 300.000 empleos destruidos el próximo año. Este desfase respecto de las previsioens del gobierno llevará a una desviación superior a los 1.000 millones de euros en las próximas cuentas.