El déficit en las transferencias corrientes alcanzó en agosto los 7.200 millones, un 2,85% superior al del mismo mes del 2008, mientras que el de ingresos fue de 1.800 millones, un 12,5% más que en agosto del pasado año.
El saldo positivo de los servicios fue de 1.800 millones, un 57,14% menos que en agosto del pasado ejercicio, y la cuenta de bienes tuvo un superávit de 6.000 millones, frente al déficit de 4.100 millones de un año antes.
El BCE añadió que la balanza por cuenta corriente de la zona del euro acumulada en doce meses tuvo en agosto un déficit de 106.500 millones (1,2% del Producto Interior Bruto), un 89,83% superior al de agosto del 2008.
Este déficit estuvo motivado, sobre todo, por el aumento del déficit en ingresos y la reducción del superávit en servicios.
En la cuenta financiera del área euro, las inversiones directas y de cartera de la zona registraron en agosto unas entradas netas de 57.000 millones, un 119,23% más que en el 2008.
En los últimos doce meses hasta agosto, las inversiones directas y de cartera acumularon unas entradas netas de 424.000 millones, frente a las salidas netas de 29.000 millones de un año antes.
La balanza de pagos recoge las transacciones comerciales y financieras de un país o un grupo de países en relación con otros y está compuesta de la cuenta corriente y la cuenta de capital.