Aguirre había expresado su apoyo en público a su «número dos» en el Ejecutivo regional, Ignacio González, como presidente de Caja Madrid, pero éste ha expresado este lunes su «apoyo personal» a Rato como candidato a ese puesto para que el proceso de renovación en la entidad culmine «cuanto antes».
González ha agradecido el apoyo que ha recibido de todos los sectores y ha aclarado que su posición en este proceso «no ha sido otra que articular un gran acuerdo de estabilidad entre todos los sectores en Caja Madrid en beneficio de la misma».
Aguirre se ha apresurado a resaltar la lealtad de González y ha asegurado que ella misma está decidida a «lograr la estabilidad de una institución tan importante como Caja Madrid».
La presidenta regional ha destacado que González «continúa así una serie de actuaciones llevadas a cabo con toda lealtad para lograr la estabilidad» de la Caja y ofrece «un nuevo servicio a los madrileños» y «a los españoles».
En la misma línea conciliadora, el Gobierno municipal de Alberto Ruiz-Gallardón está dispuesto a retirar el recurso judicial que mantiene paralizado el proceso electoral en la Caja, como un «gesto» para «favorecer» la elección de Rodrigo Rato como su presidente.
«Si nos piden la retirada del recurso, lo haremos», han indicado fuentes del Ayuntamiento de Madrid tras conocer que González había apoyado en público a Rato.
Caja Madrid se ha referido, en un comunicado, a este recurso y ha afirmado que considera prudente que una juez haya suspendido el proceso electoral tras el mismo, pero ha mostrado su oposición a dicha medida sólo con el fin de que se pueda celebrar una vista pública en la que todos los interesados aleguen en defensa de sus derechos.
El PP de la Asamblea de Madrid ha expresado, a través de su portavoz adjunto, Pedro Muñoz, su «apoyo» a la candidatura de Rodrigo Rato para presidir Caja Madrid, «si cuenta con el apoyo mayoritario de los sectores que componen la entidad».
El portavoz del PP en la Cámara regional, David Pérez, ha matizado que «no se puede tratar igual a la agredida que al agresor», en alusión a Aguirre y a Cobo.
Desde el PSOE, la secretaria de Organización, Leire Pajín, espera que el PP «haya aprendido la lección» tras «el lamentable episodio» de los últimos días, y ha dicho que el problema del líder del PP, Mariano Rajoy, «no es la crisis, sino Aguirre y Camps».
Ha subrayado que los problemas de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, son «acabar con Gallardón, echar a Cobo y mandar en Caja Madrid», y los del alcalde, «ver cómo conspira contra Aguirre y se sitúa en una situación de salida inmejorable para la carrera sucesoria».
El secretario general del Partido Socialista de Madrid, Tomás Gómez, ha expresado su confianza en que si Rodrigo Rato es elegido presidente «garantice que no va a dejar» la entidad «a medias», como hizo en 2007 con el Fondo Monetario Internacional.
Desde IU, Gaspar Llamazares ha afirmado que «es infumable e inaceptable» que un ex vicepresidente y ex ministro pueda ser nombrado presidente de Caja Madrid.
Por su parte, el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, ha asegurado que los problemas de Caja Madrid no repercuten directamente en el conjunto del sistema financiero español, ya que, «por suerte, tenemos entidades financieras muy sólidas en general».