Asimismo, ha señalado que la crisis ha obligado a la empresa a cerrar unas rutas en invierno, «relativamente pocas», y ha afirmado que la compañía tiene «un ambicioso plan de reestructuración para reducir costes y ser más eficientes, sin cambiar el nivel de servicios a los clientes».
«Los momentos para la aviación son difíciles y complicados y lo que tenemos que hacer todas las aerolíneas es asegurarnos que sobrevivimos y, ante esta caída en la demanda y en los precios, ser capaces de ajustar nuestros costes, que es lo que estamos haciendo en Spanair», ha subrayado.
Soriano ha señalado que el futuro de Spanair pasa por potenciar las conexiones vía Barcelona con muchos lugares del mundo gracias a su colaboración con la red Star Alliance.
Ha explicado que la intención de la compañía es abrir destinos en 2010 y 2011 desde la capital catalana de carácter nacional e internacional a través de servicios red que permitan a un pasajero tomar el avión, por ejemplo, en Asturias llegar a Barcelona en el momento correcto para poder enlazar con otro vuelo que le lleve a lugares como Washington y Buenos Aires.
La conferencia dada por el ex vicepresidente del Fútbol Club Barcelona ha versado sobre la industria de la aviación comercial.
«Una industria compleja que a veces cuesta un poco de comprender para mí también que sólo llevo seis meses», ha reseñado Soriano, que ha dicho que el futuro de las aerolíneas está en pertenecer a las compañías de bajo coste o, como es la intención de Spanair, estar entre las que ofrecen un servicio completo.
Para el presidente de Spanair, el futuro de la compañía «pasa primero por ser una empresa rentable y poner los cimientos desde el punto de vista operativo y financiero para poder crecer».
Soriano ha explicado que uno de los problemas que tiene las aerolíneas es que sus costes son fijos aunque la demanda caiga y que cuesta lo mismo transportar en un avión a tres pasajeros que a 300.
Renegociación y cambios
El ajuste prevé la renegociación de los contratos, cambios en los convenios colectivos y reajustes de personal que ahora se están negociando para mejorar la eficacia de la empresa.
Spanair, que prevé entrar en beneficios en 2011, pasó a manos de inversores e instituciones catalanes a principios de año, cuando se hicieron con un 80,1% del capital, mientras que el resto quedó en manos de la aerolínea escandinava SAS.
La compañía tiene pendiente una ampliación de cien millones de euros y su presidente, Ferran Soriano, espera completar los 35 millones que faltan antes de fin de año, aunque no descarta que se alargue a 2010.
La aerolínea prevé que antes de que acabe este año se incorporen nuevos inversores y aporten capital para la ampliación.
IEASA reúne a los accionistas catalanes de Spanair y en su capital participan Volcat 2009, Inversions Turístiques i Comercials, la empresa creada por Turismo de Barcelona, Catalana d’Iniciatives y Fira de Barcelona.