Las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores muestran una caída de todos los negocios del grupo salvo de las infraestructuras, en línea con el año anterior, con lo que los ingresos totales se redujeron el 9,8%, hasta 4.697 millones.
En consecuencia, el beneficio bruto de explotación, o ebitda, se redujo el 4,8%, hasta los 711 millones, después de que todas las divisiones de la compañía recortaran su ebitda, salvo servicios logísticos y de transporte, que lo aumentaron casi un 62% debido a la reestructuración de Trasmediterránea.
El peor comportamiento fue el registrado por la división de energía, cuyos ingresos disminuyeron el 30,1%, hasta los 864 millones, debido al descenso de precios fijados en el mercado eléctrico, así como a una caída de la actividad industrial.
Por el contrario, el área de infraestructuras, el principal negocio del grupo, subió ligeramente sus ingresos, un 0,9%, hasta los 2.648 millones, gracias al incremento de la facturación procedente de las concesiones.
Sin embargo, la capacidad instalada total se incrementó el 66%, hasta los 7.308 megavatios, como consecuencia de la compra de 2.002 megavatios de activos eólicos e hidráulicos a Endesa.
La cartera de obra descendió el 5,9%, hasta los 7.178 millones, de los que la mayoría correspondieron a obra civil nacional.
La reducción de actividad de promoción residencial en España fue la causante de que la división inmobiliaria recortara sus ingresos un 18,4%, hasta los 163 millones, en tanto que el importe procedente de la preventas de viviendas disminuyó de 54 a 52 millones y no se realizaron compras de suelo durante el periodo.
El área de servicios urbanos y medioambientales facturó el 7,6% menos (521 millones), debido a la venta de los servicios funerarios, en tanto que la división de los servicios logísticos y de transporte ingresaron el 14,6% menos, por la reducción de actividad de Trasmediterránea.
Los negocios financieros de la compañía (fondos de Bestinver, producción de vinos y gestión de medios de GPD) también generaron menos ingresos, 72 millones, que suponen una reducción del 31,6%.
La deuda total bancaria de Acciona aumentó el 35% respecto al cierre del 2008, hasta los 8.708 millones, lo que se debe a la financiación de la compra de los activos de Endesa, así como a la actividad inversora realizada durante el periodo.
En total se invirtieron 3.858 millones frente a los 1.339 millones de un año antes, de los que la mayoría se destinaron a la compra de activos a Endesa.