Las ventas de OHL crecieron en el tercer trimestre del año impulsadas por el comportamiento de su división de construcción internacional, que aportó 1.249,9 millones a la cifra de negocio, el 30,2% más.
Asimismo, experimentó un crecimiento importante la división de concesiones del grupo, al aumentar sus ventas el 35,1%, hasta los 524,1 millones, gracias al inicio de la operación en algunas autopistas de Brasil, Perú y México, y pese a la caída del tráfico en algunas concesiones y a la depreciación del euro.
Aunque la construcción nacional facturó 1.195,6 millones, lo que supone un descenso del 11,9%, la compañía señala que este negocio comienza a reflejar «cierta mejoría» y confía en su recuperación debido al «decidido impulso de inversión en infraestructuras anunciado por el Gobierno de España».
El área industrial facturó 20,6 millones, un 22,6% más, una cifra de negocio que, según la compañía, aún «carece de relevancia», si bien confía en que tenga un «crecimiento apreciable en el futuro».
También experimentó un incremento de ventas el negocio de medio ambiente del grupo, que facturó 93,5 millones, el 19,7% más, gracias a las actividades de construcción de plantas de Argelia y en Brasil, en tanto que la actividad de desarrollos disminuyó su cifra de negocio el 42,4%, hasta los 38 millones, debido a que la evolución del complejo turístico Mayakobá «está siendo más lenta de lo esperado».
La cartera de pedidos del grupo a 30 de septiembre alcanzó los 64.268,4 millones, lo que supone un incremento del 4,9% frente a un año antes.
Por su parte, la deuda neta de la compañía se situó en los 3.723,1 millones, un crecimiento del 35,12%.