En concreto, el PIB francés creció un 0,3 por ciento, como ya hiciera en los tres meses anteriores, mientras que el alemán -que entre abril y junio había aumentado esa misma cifra- cerró el tercer trimestre con un alza del 0,7 por ciento, por encima de las expectativas de muchos analistas. Siguiendo la estela de las dos «locomotoras» europeas, Italia, Holanda, Bélgica y Austria volvieron al crecimiento en este trimestre.
En el caso italiano, los datos confirmaron el fin de la recesión de más de un año, con un crecimiento del 0,6 por ciento, dejando a España como la única gran economía del euro que sigue en números negativos, con una caída del PIB del 0,3 por ciento.
La leve mejoría registrada por la economía española, que se anotó la menor caída trimestral desde el comienzo de la recesión, no evita que España se quede claramente por detrás de la mayor parte de sus socios del euro en el proceso de recuperación. Junto a ella, sólo Grecia (-0,3 por ciento) y Chipre (-1,4) siguen en negativo dentro de los países de la Eurozona para los que hay datos.
La Comisión Europea (CE) celebró los números positivos del conjunto de los países del euro, pero advirtió de que la mejora de la economía será «gradual», tal y como indicó en sus previsiones para los próximos meses.
«Hemos salido de la recesión, pero no del impacto de la crisis», señaló la portavoz de Asuntos Económicos del Ejecutivo comunitario, Amelia Torres, en declaraciones a los periodistas.
Fuera de la región del euro
Fuera de la región del euro, Reino Unido moderó su desplome pero continúa también en negativo (-0,4 por ciento), mientras que Hungría (-1,8 por ciento) y Estonia (-2,8 por ciento) registran las peores caídas trimestrales.
Por su parte Lituania, con una economía duramente golpeada por la crisis, dio un giro radical en los últimos meses y vio como su PIB creció un 6 por ciento, cuando en el periodo anterior había caído un 7,7 por ciento.
Si se compara con el tercer trimestre de 2008, la economía en el área de la moneda única se contrajo de julio a septiembre un 4,1 por ciento y el 4,3 en toda la Unión, frente al 4,9 y el 4,8 registrado entre abril y junio.
Por el momento, todos los países con datos disponibles siguen viendo caer su PIB en términos interanuales.
Entre las principales economías comunitarias, Alemania registró una bajada respecto al año anterior del 4,8 por ciento (un punto menos que en el trimestre precedente) y Francia del 2,4 por ciento (cinco décimas menos).
La economía británica se contrajo en términos interanuales un 5,2 por ciento (frente al 5,5 de los tres meses anteriores), la italiana un 4,6 por ciento (frente a la caída anterior del 5,9 por ciento) y la española un 4 por ciento (dos décimas menos).
La peor evolución interanual en los Veintisiete es la de Estonia y Lituania, que pese a su recuperación, acumulan caídas en torno al 15 por ciento.
Con estos datos, Europa pone fin oficialmente a su peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial y acompaña a otras potencias como Estados Unidos y Japón en la vuelta al crecimiento económico.