Los ingresos de explotación disminuyeron el 19,1% y supusieron 3.333 millones de euros en los primeros nueve meses debido a la caída del tráfico aéreo, más acusada en el segmento de pasajeros de negocios.
El coeficiente de ocupación alcanzó el 80%, con un descenso de casi un punto respecto mismo periodo del año anterior, sobre todo en el sector intercontinental.
La ocupación creció en las rutas nacionales y europeas, con una subida de 2,7 y 2,3 puntos porcentuales, respectivamente, mientras que disminuyó en las de largo radio 3,2 puntos, por ser este mercado donde menos se ha reducido la oferta.
La compañía explicó que la pérdida en el beneficio neto de 16,4 millones en el tercer trimestre supone una mejora con relación a la de los dos trimestres anteriores, aunque en el tercer trimestre de 2008 el beneficio había sido de 30,4 millones de euros.
Iberia efectuó entre enero y septiembre ajustes en el volumen de oferta de los tres sectores de su negocio: largo radio, medio y nacional, que supusieron una disminución del 5,8% del número de asientos por kilómetro ofertado (AKO).
Los gastos de explotación descendieron el 11,4 por ciento hasta septiembre y el gasto de combustible, que supone un 24,3% de los costes de explotación del grupo, disminuyó 311,9 millones de euros con relación al periodo del año anterior.
También disminuyeron los gastos de personal, el 3,4%, debido a la reducción de la plantilla media del grupo, que afectó a todos los colectivos, así como a las medidas de contención salarial.
Fusión con BA
La presentación de resultados se produjo un día después de que los Consejos de Administración de Iberia y BA sentasen las bases de su fusión mediante la firma de un memorando de intenciones vinculante.
La operación se completará a finales de 2010 y dará lugar a uno de los tres mayores grupos aéreos del mundo, a través de un nuevo «holding» denominado temporalmente TopCo, en el que los accionistas de Iberia tendrán una participación del 45% frente al 55% de los de BA.
El máximo responsable de Iberia, Antonio Vázquez, presidirá el nuevo grupo y el de BA, Martin Broughton, será su vicepresidente, mientras que el consejero delegado de la británica, Willi Walsh, desempeñará el mismo puesto en TopCo.
Vázquez consideró positivo el comienzo de las negociaciones con los sindicatos, así como la cooperación que se vislumbra, tras el acuerdo de fusión entre las compañías.
En declaraciones a EFE, agregó que la fusión «potencia una capacidad de liderazgo para estar en el tope del crecimiento, incluso de la futura consolidación en la industria de las aerolíneas mundiales» y valoró la capacidad «fantástica» de aumentar las posibilidades de las dos compañías que supone.
Las acciones de Iberia, que el jueves subieron en Bolsa un 11,78 por ciento, lideraron un día después las pérdidas del selectivo Ibex-35, al ceder un 3,15%.