En un comunicado, la Asociación de Víctimas del Terrorismo califica a De Juana de «cobarde» porque «ha empleado todos los resquicios de nuestro Estado de Derecho y de Irlanda del Norte para evitar ir a prisión», a pesar de que «no le tiembla el pulso para asesinar», ni «la voz para hacer apología del terrorismo».
«Son argumentos burdos y burlescos. Pareciera que quisiera equipararse a las víctimas, pues alega dos elementos que padecen las víctimas que sobrevivieron a sus atentados: depresión y estrés postraumático», señalan las víctimas, que han pedido al juez instructor del tribunal norirlandés que debe decidir sobre la cuestión que no se deje conmover por alguien «incapaz demostrar un ápice de humanidad».