También se refirió a las debilidades estructurales del sector financiero, de las que tanto se habla, y señaló que, según los cálculos de Citibank, la banca europea necesita entre 400.000 y 500.000 millones de euros de capital para ajustar su balance, y lo «tiene que buscar de alguna forma».
Y otro de los motivos de que en el futuro haya menos liquidez en el sistema será la nueva regulación con la que las autoridades europeas pretenden elevar el nivel de exigencia sobre el capital que tiene que tener la banca en su balance, agregó este experto.
El director de Citibank España se refirió asimismo a la sobrecapacidad del sistema financiero internacional, que es un hecho cierto, al tiempo que pedía que se dé tiempo a las entidades financieras, ya que, aseguró, no se les puede pedir que ajusten sus balances y que presten dinero al mismo tiempo «en un escenario tan complicado como el actual».
La recuperación económica será lenta y muy desigual, según Martínez Campuzano, quien indicó que lo más probable es que los países emergentes se recuperen antes que los desarrollados, que Estados Unidos lo haga antes que Europa, y Europa, antes que España.
En el escenario empresarial, la crisis también traerá un proceso de sinergias y de uniones corporativas «muy importante» en los próximos años, ya que «si no hay demanda, hay que comerse al vecino», dijo.
También señaló que las bolsas tienen que seguir subiendo para generar optimismo y riqueza financiera en los mercados y dijo que ahora mismo no están caras y que las condiciones financieras van a seguir laxas, por lo que, a su juicio, se dan todas las condiciones para que siga «la alegría» en los mercados.
Alertó, asimismo, sobre la posibilidad de que el Banco Central Europeo (BCE) decida subir el tipo «repo» a doce meses, lo que tendría efectos en el euribor a doce meses, la referencia que tienen la mayoría de las hipotecas en España.
En cuanto al tipo de cambio euro-dólar, para este experto, la divisa estadounidense tiene que seguir cayendo, entre otras razones para atraer capitales y para facilitar que los tipos de interés a largo plazo se mantengan bajos.
También se mostró de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en que el euro está sobrevalorado y dijo que un cambio adecuado estaría en torno a 1,25-1,30 dólares.