La inversión se destinará al desarrollo de los campos «Margarita» y «Huacaya», que comparten las regiones de Chuquisaca y Tarija, en el sur de Bolivia, para multiplicar por siete su actual producción de dos millones de metros cúbicos diarios de gas hasta llegar a 14 millones de metros cúbicos en 2013.
El grupo acometerá en Bolivia la construcción de una planta de tratamiento y desarrollará el proyecto en dos fases, la primera para llegar a una producción y transporte de ocho millones de metros cúbicos diarios en el primer trimestre de 2012 y la segunda para alcanzar los 14 millones hacia la mitad de 2013.
La petrolera hispano-argentina Repsol YPF no descarta que en próximos años se pueda incluso aumentar la producción y la inversión, ya que las reservas de gas probadas en la zona son de 3,7 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés), pero estimaciones previas apuntan a que pueden llegar a 10 ó 12.
Los campos «Margarita» y «Huacayas» abarcan un área de explotación de 123.000 hectáreas y comprenden cinco pozos, con una profundidad de entre 4.000 y 6.000 metros, que fueron perforados entre 1998 y 2000, informó Repsol.
El proyecto será desarrollado y explotado por el consorcio que integran en un 37,5 por ciento Repsol, British Gas con el mismo porcentaje y Panamerican Energy en un 25 por ciento, en el marco del contrato de operaciones suscrito con la estatal boliviana YPFB.
Repsol YPF indicó que su inversión será de unos 400 millones de euros (unos 562,5 millones de dólares) hasta 2013.
Respuesta a las negociaciones
Con este proyecto, dijo Brufau, se responde a las negociaciones que Bolivia entabló con la petrolera hispano-argentina durante la visita que Evo Morales realizó a España el pasado mes de septiembre.
El presidente Morales, por su parte, agradeció a Repsol sus planes de inversión para el país y reiteró que la política de su Gobierno con las empresas extranjeras es tener socios y no «dueños de los recursos naturales» de Bolivia.
«Así (como socios) la inversión extranjera siempre es bienvenida y respetada», indicó Morales.
El presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Carlos Villegas, destacó que con este proyecto se inicia el plan de inversiones quinquenales lo que, a su juicio, significa «un impulso a los diferentes campos que tienen reservas probadas».
Además, afirmó que Repsol se convertirá en «la empresa más importante que va a realizar inversiones (en el sector de hidrocarburos de Bolivia) en el transcurso de los próximos cinco años».
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos, Óscar Coca, dijo que este anuncio confirma el relanzamiento y el impulso del sector y explicó a los ejecutivos de Repsol que su departamento trabaja en la elaboración de una nueva ley de hidrocarburos en función de la Constitución que el presidente Morales promulgó el pasado febrero.
Según Coca, la nueva ley considera a las empresas privadas «como parte de ese proceso», garantiza las inversiones y «va a permitir que los inversionistas puedan sentirse seguros en el marco jurídico» que plantea la norma.
Dentro del proceso de nacionalización de los hidrocarburos iniciado por Morales en 2006, Repsol YPF vendió en mayo de 2008 a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) una pequeña parte de sus acciones para que la petrolera estatal boliviana asumiera el control mayoritario de esa filial Andina.
En la nueva sociedad, YPFB tiene una participación de poco más del 50 por ciento, Repsol, del 48,92 por ciento, y otros accionistas el 1,08 por ciento.
Bolivia tiene su mayor fuente de ingresos en el gas, sector en el que es uno de los mayores exportadores de Sudamérica.