Martínez subrayó que CCOO y UGT mantienen una postura unívoca conjunta y consideran que la postura «lógica, deseable e incluso exigible» supone que el futuro presidente cuente con el respaldo de todos.
Por su parte, López consideró que hoy mismo sería «perfectamente posible un consenso de los dos grandes partidos». «¿Cómo vamos a estar los sindicatos, entidades representativas e impositores y no van a estar los dos grandes partidos en el gobierno de la Caja?», se preguntó.
El secretario general de UGT consideró que «es tiempo» de cerrar el asunto de la caja porque «ya se ha tocado techo». «Creo que estamos dando el espectáculo, lo está dando quien lo está dando, nosotros menos, y me parece que los ciudadanos madrileños en una entidad como Caja Madrid necesitan que quien tienen la posibilidad de ponernos todos de acuerdo lo haga», explicó.
Martínez quiso dejar claro que los sindicatos creen profundamente en la estabilidad de las instituciones y «no actúan de forma partidaria nunca». «Si hablamos de estabilidad, quien preside la caja podrá contar siempre con los sindicatos», dijo y, en este sentido, le recordó a Rato que la mayoría en la entidad la da «la responsabilidad de la que han hecho gala» las organizaciones sindicales.
Por su parte, Javier López estimó que «no sería bueno y sólo daría motivo a más conflictos el que alguien faltase en ese gran consenso que tiene que presidir Caja Madrid».
El secretario general de CCOO recordó que el sindicato ya ha tenido encuentros con Rato y ya le han planteado que va a contar con su apoyo, al tiempo que le han exigido que respete la representación que CCOO tiene en la Caja. «No puede haber empresarios representando a las entidades representativas de la comunidad y excluirse a los sindicatos», sentenció.
Sumar a todos
También insistió en que en estos encuentros se le ha pedido tanto a Rato como a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que «no basta» con un acuerdo con cada una de las partes, sino que hay que sumarlos a todos con el fin de que «nadie se quede fuera».
«Es muy complicado. Creo que es absolutamente necesario y creo que no sería bueno que Rato gobernase Caja Madrid con una parte importante de la representación de los madrileños, en este caso, con parte de la representación política, fuera del gobierno de la caja con consejeros que no participan del trabajo diario del gobierno de la caja», señaló.
En este punto, indicó que la jefa del Ejecutivo madrileño, «no haciendo caso a ese planteamiento, se metió en un charco que ha condenado a Caja Madrid desde diciembre de 2008 a un conflicto permanente» que, a su juicio, debe ser superado, empezando por su origen: «el no contar con todos, el no intentar integrar a todos en el gobierno real de la caja».
López aseveró que «nadie tiene derecho a bloquear el funcionamiento de la caja», razón por la que han desistido de pedirle a la jueza que mantenga al suspensión del proceso electoral «precisamente para no bloquear la gobernabilidad» de al entidad.
«Creo que no debe nadie sentirse fuera del gobierno de la caja salvo que él se autoexcluya, pero creo que no es el caso y es perfectamente posible, incluso hoy mismo el que se consiguiese un consenso de los dos grandes partidos», concluyó.