«El discurso de Obama fue una amalgama de lenguaje realmente inspirador, de empatía (sobre todo, y con razón, para los desempleados) y de una lista de quehaceres en programas legislativos que le gustaría aprobar. Aunque nos gustan muchas de esas iniciativas es obvio que todas esas promesas no pueden conseguirse en un Washington que no pudo siquiera ponerse de acuerdo en su gran proyecto del año».
«Hizo hincapié en los empleos y en la economía y la lucha de los estadounidenses de clase media. Reconoció algunos errores políticos durante su primer año, y continuó su llamamiento elocuente a la cooperación bipartidista en el Congreso. Este diario -Los Angeles Times- apoya a Obama y, en general, hemos estado satisfechos con su actuación hasta la fecha. Creemos que no sea su culpa (estrictamente) perder el voto número 60 en el Senado o que los republicanos hayan sido implacablemente partidistas. Vemos su discurso activo e incluso, a veces, que nos inspira. Pero ahora estamos esperando ver qué puede hacer ante ese pueblo amargamente dividido. Buena suerte para el Presidente Obama».