«La City siempre ha estado tranquila sobre la economía española. Estas conversaciones, sobre todo en el terreno de la inversión, sirven para tener mejor información y generan una percepción de mejor conocimiento de la situación, dijo Campa.
La reunión tuvo especial repercusión por las dudas que han surgido en los últimos días en los mercados sobre la solvencia financiera de España y sobre la voluntad del Gobierno español de emprender reformas de calado, pero Campa explicó que «estaba planificada desde hacía meses».
«Se hace todos los años con motivo del anuncio de la estrategia de la deuda para el año, y este año no iba a ser diferente, dijo.
Campa consideró «muy agradecida» la acogida de los inversores de la City a la información que desgranó sobre la economía española y subrayó que «nuestro trabajo es explicar la racionalidad subyacente del comportamiento de la economía y de la situación de las cuentas públicas».
A partir de ahí, añadió el secretario de Estado, «los inversores reaccionan a medio plazo, que es lo importante».
Campa rechazó la comparación de la situación española con los problemas financieros que atraviesa Grecia y dijo que los movimientos especulativos que ha habido en torno a las cuentas públicas españolas «son movimientos del corto plazo».
«Sabemos que los mercados tienen una característica de reaccionar muy rápido a estas noticias y, después, a medio plazo, asentarse, argumentó el «número dos» del ministerio de Economía.
Sobre el déficit público, manifestó que no se puede dar una cifra definitiva (para 2009) todavía porque falta conocer a mediados de marzo las cuentas de la actividad de los autónomos y consideró que no es previsible que superé la cifra prevista del 11,4 % del PIB.
«No tenemos ninguna expectativa de que vaya a haber una desviación. Estamos trabajando con una predicción que es robusta y razonable y yo creo que en la reunión de esta tarde se ha confirmado, señaló el secretario de Estado, quien hizo además una encendida defensa de la moneda única europea.
«El euro ha sido un éxito durante los últimos 10 años y así lo ha demostrado. Todos los países que estamos en el euro estamos comprometidos con él y no creo que haya ninguna aparente maldición contra el euro, manifestó Campa.