«Algo pequeñito», un vals moderno, sirvió a Diges para ganar la mayoría de los votos, tanto del jurado del programa como de los televidentes, que eligieron esta noche, al 50 por ciento, al representante de TVE en la 55 edición del festival de Eurovisión, que se celebrará en Oslo el 29 de mayo.
Daniel Diges era uno de los favoritos de los «eurofans», por su propuesta «original», como señaló en conversación con Efe el intérprete, nacido en 1981 en Alcalá de Henares (Madrid) y más conocido hasta ahora como actor de musicales de éxito, como «Mamma Mía», «We Will Rock You» u «Hoy no me puedo levantar».
Ahora, como señaló el cantante durante la gala, «podríamos quedar en un buen puesto en Oslo, estoy convencido». Diges se impuso en la final celebrada en directo en los estudios Buñuel de Madrid a los otros nueve candidatos más votados en la página de web de RTVE: Coral Segovia, John Cobra, Lorena, Samuel y Patricia, Fran Dieli, Venus, Anabel Conde, José Galisteo y Ainhoa Cantalapiedra.
Anne Igartiburu dio comienzo pasadas las 22:15 horas a un programa especial en La 1 en el que se respiraban «muchos nervios»; de hecho, tuvo que pedir «tranquilidad» a los «eurofans», que la interrumpieron con sus ánimos a los artistas.
La conductora vasca -ayudada en las labores de presentación por Ainoha Arbizu, situada en la «escalera de los nervios», que daba paso a los camerinos-, presentó al jurado «muy experto» en temas musicales: el actor Manuel Bandera, la productora musical Mariola Orellana y tres periodistas de Radio Nacional de España: José María Íñigo, Toni Garrido y Pilar Tabares.
La anécdota de la noche
Tabares, directora y presentadora del programa «Me lo dices o me lo cantas», definió la gala como «muy complicada» por el nivel de los participantes, pero a mitad de las actuaciones se complicó por la actuación del rapero John Cobra, una «rara avis» entre artistas tradicionales de Eurovisión, entre ellos seis antiguos concursantes del programa televisivo «Operación Triunfo».
Cobra, presentado por Anne Igartiburu como «la pesadilla de los eurofans», no se tomó nada bien los abucheos de éstos cuando acabó su canción, e inició una serie de exclamaciones obscenas mientras se echaba mano repetidamente a la entrepierna.
Igartiburu intentaba calmar al intérprete de «Carol», pasándole la mano por la cabeza, pero las expresiones de John Cobra se repitieron frente al jurado; Pilar Tabares, encargada de comentar su actuación habló de la «suerte» que tenía de estar en la gala, aunque señaló: «La canción no me gusta para Eurovisión, y no tengo nada en contra del rap».
Cuando Cobra se iba a retirar, José María Iñigo pidió la palabra para decir al rapero que «cuando uno se presenta ante el público, tiene que estar dispuesto a que le rompan la cara… Lo que has hecho aquí te descalifica para siempre», a lo que el cantante replicó, antes de abandonar el escenario: «Me da igual, yo soy yo mismo, y al que no me quiera como soy que le den por el culo».
Al principio del espacio, un reportaje recordó que, después de recibir más de 500 canciones en su fase de internet, se desecharon alrededor de 200, entre ellas las de «casos sonados», como el de la periodista Karmele Marchante o el grupo El Pezón Rojo, «cuyos temas no eran inéditos», se apuntó, para concluir: «Pase lo que pase, siempre nos acusarán de tongo».
Oliart se averguenza
El presidente de RTVE, Alberto Oliart, lamentó hoy la «escena» que protagonizó ayer el cantante John Cobra en la gala emitida por TVE en la que se eligió al candidato español para Eurovisión, pero señaló que «los directos son así».
Preguntado por la senadora del Grupo Popular María carmen Riolobos durante la Comisión de Control Parlamentaria de RTVE en el Senado, Oliart indicó que no había visto la gala, pero señaló que, por lo que le habían contando, la actitud del cantante fue «digna de toda censura» y esperó «ni verle ni conocerle».
Durante el proceso de preselección, los internautas denunciaron que John Cobra promovía la violencia a través de sus vídeos en Internet, pero Televisión Española no vio ninguna razón para expulsar al concursante e impedir su participación en la gala de esta noche, donde protagonizó un rifirrafe con el público, al que insultó tras ser abucheado.
A pesar de que la conductora del espacio, Anne Igartiburu, le conminó en varias ocasiones a que guardara la compostura al tratarse de un «programa en directo», John Cobra elevó el tono del enfrentamiento con gestos obscenos que culminaron con varios «¡Comedme la polla!». La presentadora vasca tuvo finalmente que pedir disculpas al público por el comportamiento del concursante.
Oliart afirmó que «la apertura» a la participación ciudadana, que en el concurso de Eurovisión se realiza mediante las votaciones del público, es «un mandato» para la televisión pública, aunque reconoció que, «como cualquier proceso abierto», la selección de candidatos por el público pueda dar lugar a «abusos». Por ello, no descartó cambiar las normas del concurso el año que viene para establecer «un mejor proceso de filtro en las candidaturas» y «evitar estos abusos».
Concretamente, apuntó a la posibilidad de que un «jurado profesional» elimine algunas candidaturas «desde el primer momento» o establecer una «via complementaria» para que participen cantantes con una carrera profesional.
Por su parte, la senadora ‘popular’ se quejó del «bochornoso espectáculo» que se vio ayer por televisión en la gala de Eurovisión con «un público estupefacto» y «una presentadora abochornada y desbordada por los hechos». «Nos merecemos que este concurso se haga con seriedad buscando la calidad y el arte», señaló.