También se registrarán precipitaciones en el cuadrante noroeste peninsular que se extenderán al resto del tercio norte y serán localmente tormentosas en Pirineos.
En el resto de la península se producirán intervalos nubosos con posibilidad de alguna precipitación débil y dispersa, excepto en el sureste y en Baleares, donde predominaran los cielos poco nubosos, y en Canarias, donde habrá algún intervalo nuboso en el norte de las islas.
La cota de nieve estará el viernes por encima de 1.000 metros en el noroeste, y subirá hasta los 1.800 en los Pirineos orientales. Según la AEMET, las temperaturas irá en descenso, excepto en la vertiente mediterránea, donde estarán sin cambios, y en la atlántica donde subirán.
El sábado y el domingo predominarán los cielos poco nubosos, aunque se mantendrán algunas precipitaciones en el noroeste, especialmente el sábado en el Cantábrico y en Pirineos occidentales.
La cota de nieve subirá el fin de semana, y también las temperaturas en todas las zonas, y los vientos del oeste disminuirán su intensidad.
Precipitaciones moderadas
El lunes y el martes, un nuevo sistema frontal atlántico cruzará la península de oeste a este, con precipitaciones que serán moderadas en el noroeste, disminuyendo hacia el sur y el este peninsular. Esas precipitaciones no afectarán en principio ni al sureste ni a Baleares, y disminuirán durante el martes 30.
Las temperaturas experimentarán un descenso ligero a moderado, excepto en Baleares y en Canarias, donde permanecerán sin cambios.
Para el miércoles y el jueves se espera una estabilización del tiempo en todas las zonas, con predominio del cielo poco nuboso o despejado, exceptuando el noroeste, donde habrá intervalos nubosos con posibilidad de alguna precipitación débil.
Las temperaturas irán a en ascenso ligero o sin cambios y los vientos flojos variables serán del suroeste moderados en la vertiente atlántica.