«Es especialmente necesaria una aceleración del crecimiento», insistió al alertar de que Europa puede apearse de la carrera que llevan EEUU y Asia por la preeminencia económica mundial.
«¿Queremos o no ser parte del juego en 10-20 años? Europa puede verse marginada si no aumenta su competitividad», remarcó Strauss-Kahn.
Durante su visita relámpago de este martes a Rumanía, Strauss-Kahn se reunió con el presidente rumano, Traian Basescu, el primer ministro, Emil Boc, y el gobernador del Banco Nacional, Mugur Isarescu.
El presidente del FMI pronosticó una recuperación moderada de la economía rumana, que crecerá en 2010 al 1 por ciento después registrar una recesión del 7 por ciento el ejercicio pasado.
Strauss-Kahn evaluó con las autoridades las consecuencias del crédito de 13.000 millones de euros que Rumanía contrajo hace un año con el FMI, y pronosticó un crecimiento del paro en el país balcánico.
«Para llevar a Rumanía a la sostenibilidad fiscal son necesarias medidas dolorosas para la población», afirmó el jefe del FMI.
Rumanía ha recibido hasta ahora 9.000 millones de euros del crédito contratado en marzo de 2009 a esta institución multilateral.
Una delegación de expertos del FMI analizará a finales de abril si el Gobierno ha cumplido los compromisos adquiridos de austeridad presupuestaria y reformas estructurales y puede seguir recibiendo dinero del préstamo.