El Hospital Clínic ha facturado unos 25.000 euros a la Casa del Rey por la estancia de Don Juan Carlos y de su séquito en la planta Barnaclínic, una factura que no incluye los gastos de la intervención quirúrgica a la que fue sometido y que corren a cargo de la sanidad pública.
Según han informado a Efe fuentes del Clínic, la factura se enviará este jueves a la Casa del Rey e incluye la estancia del Rey y de su séquito en Barnaclínic y extras como la seguridad del hospital y de la entrada y salida de material, refuerzo del personal sanitario, horas extras de enfermería y un médico de guardia que estuvo a disposición del Monarca durante las 24 horas del día.
Las mismas fuentes han precisado que la factura no incluye los gastos de quirófano, la operación, la anatomía patológica, la enfermería normal del hospital, gastos que van a cargo de la sanidad pública «como en el caso de cualquier ciudadano que se opere en el Clínic y requiera una operación como la que fue sometido el Rey«.
Según ha informado El Periódico de Catalunya, la Zarzuela reservó todas las dependencias de Barnaclínic entre el 6 y el 12 de mayo, aunque finamente el Rey y su séquito sólo utilizaron ocho de las dieciséis habitaciones de esta planta.
La seguridad del Rey y personal militar se instaló en las dependencias de Barnaclínic y además se habilitó un despacho de trabajo para el personal del Rey.
También se improvisó una sala de recepciones oficiales en la que Don Juan Carlos recibió varias visitas como las del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, o del presidente de la Generalitat, José Montilla.
«Una muy favorable» evolución
Barnaclínic, aunque forma parte del Hospital Clínic, es una entidad de carácter privado que paga al hospital el alquiler por el uso de quirófanos y de la tecnología del hospital.
El Rey dejó el hospital Clínic de Barcelona el pasado 11 de mayo por su propio pie, después de su intervención para extirparle un nódulo en el pulmón de carácter benigno debido a su «muy favorable» evolución.
Don Juan Carlos, a la salida del hospital, resaltó que «en España tenemos que estar orgullosos de la sanidad pública que tenemos, tanto en Cataluña, como en Madrid».
El Rey fue intervenido el 8 de mayo por un equipo médico dirigido por Laureano Molins, jefe de Cirugía torácica del Hospital Clínic.
En la operación se le extirpó una calcificación de 19 por 12 milímetros en la región apical del lóbulo superior del pulmón derecho en la que, durante una revisión, se habían detectado cambios morfológicos, pero cuyo análisis posterior ha descartado por completo la presencia de células cancerígenas.