El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha afirmado que «ningún tribunal ni ninguna sentencia» privará a Cataluña de conseguir sus propósitos, que se formularán, ha asegurado, «tantas veces como haga falta».
En la presentación de la memoria anual de actividades de la Comisión Jurídica Asesora de la Generalitat, Montilla ha señalado que, pese a las «incertezas actuales, Cataluña mantendrá su «voluntad inalterable» de autogobernarse.
«No hay otro camino plausible, ha juzgado, para ampliar el bienestar y la cohesión ciudadana, que proyectar el futuro desde la «singularidad como nación» de Cataluña y desde los valores democráticos que la caracterizan.
Montilla ha recordado asimismo que esta semana se han cumplido cuatro años desde que se celebró el referéndum sobre el Estatut catalán, una consulta que «completó el camino a seguir con total respeto a las leyes».
El presidente catalán ha llamado a actuar «ahora más que nunca con serenidad, y ha abogado por que cada nuevo paso que se dé en este proceso se haga con la máxima expresión de «unidad y fuerza».
Tener «decencia»
Por su parte, el líder de CiU, Artur Mas, ha pedido al Tribunal Constitucional que no haga el «estropicio» de dictar sentencia antes de que se celebren las elecciones catalanas y antes de que se renueve el propio tribunal.
A juicio de Mas, cree que los magistrados del alto tribunal deberían de tener la «decencia» de no dictar sentencia para salvar su prestigio y que deberían esperar hasta los próximos comicios autonómicos.
El líder de CiU explica que de haber sentencia, se puede provocar un problema «muy profundo» entre Cataluña y el resto de España.
Sobre la votación artículo por artículo por parte de los magistrados del Constitucional, Mas piensa que es un «despropósito» y que este tipo de votación sólo debe darse cuando existe una inconstitucionalidad y que en el caso del Estatut no existe.