La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJ) no ha admitido la querella por un presunto delito de prevaricación presentada por un funcionario de la Comunidad Autónoma contra el juez que rechazó su petición de ser mantenido por su padre mientras estuviera suspendido de empleo y sueldo.
El auto del TSJ, al que ha tenido acceso EFE, señala que este funcionario pidió en la demanda presentada ante un Juzgado de Primera Instancia de Murcia que se condenara a su padre a pasarle una pensión por alimentos mientras no percibiera ingresos por su trabajo.
Añadía que «tenía un problema» como funcionario y que había planteado un recurso ante la jurisdicción contencioso- administrativa, por lo que solicitó al juez que mientras se resolvía este pleito se declarara judicialmente la obligación del padre de mantenerlo.
Durante el juicio celebrado ante el Juzgado, su progenitor se negó a pasarle la pensión por alimentos y alegó que la situación por la que atravesaba el demandante era exclusivamente de su responsabilidad, ya que él se había cuidado de darle carrera y de pagarle los estudios de una licenciatura, por lo que consideraba que no estaba obligado a seguir alimentándole.
El juez le dio la razón y desestimó la demanda presentada por su hijo, que planteó entonces una querella por presunta prevaricación contra el magistrado en la que le reprochaba también que no hubiera tenido en cuenta los apuros por los que atravesaba y «la crisis económica que sufre España en estos momentos».
El TSJ afirma que «en el presente caso la querella es manifiestamente infundada, toda vez que los hechos alegados no revisten caracteres de delito, lo que determina el archivo de estas diligencias».
Fuentes judiciales han indicado a EFE que el demandante fue expedientado y suspendido de empleo y sueldo por la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia por no acudir a trabajar sin causas justificadas.