Los discursos de los grupos políticos que intervinieron por la tarde en el debate hicieron ver a Zapatero lo solo que está. Y lo urgente que es recomponer acuerdos. Todos, sin excepción, fueron muy duros y subrayaron que ya no pueden fiarse de él. A no ser que ofrezca garantías. El presidente del Gobierno no las dio pero lanzó unas cuantas promesas para aplacar los ánimos. Con los ojos puestos en los próximos Presupuestos Generales del Estado, Zapatero prometió recomponer el Estatut y otorgar nuevas transferencias a Euskadi
Josep Antoni Duran i Lleida le explicó que la situación es preocupante porque Cataluña y España están “más lejos que nunca” y porque “habrá que reconsiderar el pacto constituyente”. Para CiU, la sentencia del Constitucional ha sido “el acto más separador de los últimos 35 años”, por lo que no aceptan que Zapatero intente minimizar su impacto. La promesa de volver a dialogar con Cataluña para rehacer algunas partes del Estatut le pareció poco consistente y Duran pidió garantías.
Lo mismo hizo el PNV sobre el desarrollo del Estatuto vasco vigente, que ve “tan incumplido” como cuando Zapatero llegó al poder. Después de escuchar la promesa de que el Gobierno está dispuesto a otorgar a Euskadi nuevas transferencias y a solventar “algunos flecos y plazos incumplidos”, Josu Erkoreka advirtió de que se iba tan “decepcionado” como había llegado. Igual que Duran, dijo estar “cansado de ser responsable” y acusó a Zapatero de falta de palabra. Zapatero dijo que “no era el momento ni el lugar” de entrar en detalles pero repitió tres veces su disposición a “concertar transferencias”. Erkoreka acabó su turno concediéndole el beneficio de la duda y esperando que Zapatero “dé un giro también en este tema”.
El discurso más duro lo hizo Joan Ridao, de ERC. En materia de economía, dijo que “chapoteamos en la ciénaga de la crisis” y que Zapatero ha “agravado” la situación. Según él, el presidente pecó de soberbia al no propiciar un pacto de Estado para encarar la crisis y tampoco fue valiente a la hora de poner “coto a la avaricia del sistema financiero”. En su diatriba, Ridao dijo que el Gobierno es “un siniestro carnaval de zombis” y que Angela Merkel y Nicolas Sarkozy han “sacudido a Zapatero en sus posaderas”, entre otras lindezas.
Por lo que respecta al Estatut, el portavoz de los independentistas catalanes se mostró “rabioso” por una sentencia “dictada por un tribunal manoseado por PSOE y PP” y recordó que los autonomistas y los federalistas del PSC se sienten igual que él. Por eso señalaron que ha llegado el momento de iniciar una “transición tranquila y democrática hacia la independencia y una buena vecindad con España en el seno de la UE”. Zapatero acabó confiando en que la relación con Cataluña se arreglará. La reunión en Barcelona con José Montilla será el próximo 23 de julio en Barcelona.