La turista malagueña de 67 años dada por desaparecida al hundirse un barco en Turquía, Paloma Gálvez Petersen, murió al hundirse con la embarcación que se había incendiado, según ha asegurado su hija, Alicia Canales, que explica que hay testigos del fallecimiento.
«Es una tragedia, es un accidente, fue muy rápido. El barco se incendió, los demás saltaron y a mi madre no le dio tiempo y se fue al fondo», ha manifestado la hija de la víctima, que ha precisado que en el accidente han resultado lesionadas de carácter leve otras dos integrantes del mismo grupo familiar.
Paloma Gálvez es una de las propietarias del hospital privado Doctor Gálvez de Málaga, conocido anteriormente como Sanatorio Gálvez, que empezó a funcionar a principios del siglo pasado, y ella es nieta del ginecólogo Gálvez Ginachero, fundador de este centro sanitario.
«Se trataba de las vacaciones de una familia como tantas y han tenido un accidente; son malagueños que han hecho muchas cosas por Málaga y son muy queridos», ha asegurado Alicia Canales.
Las lesionadas son primas de Alicia, María Gálvez e Inés Gálvez, la primera ha sufrido una rotura de tobillo y ha sido dada de alta y la segunda es una niña que ha sufrido quemaduras leves.
El grupo familiar estaba compuesto por 18 personas, algunos de ellos residentes en Portugal y la otra parte en Málaga. Alicia Canales ha comentado que el resto del grupo -su tía con sus hijas y nietos- está bien asistido por la Embajada española y las autoridades turcas; que se gestiona su retorno y que un familiar va a desplazarse hasta Turquía.
En la embarcación, en la que también viajaban cinco integrantes de la tripulación, se hundió en el sur de Turquía tras declararse -por causas desconocidas que se investigan- un incendio a bordo, según confirmó a Efe la Embajada de España en Turquía.
Todos los pasajeros, salvo Paloma Gálvez, y los tripulantes del «Kayhan-9» fueron rescatados a tiempo por los guardacostas que llegaron al lugar del siniestro.
El barco se hundió en su cuarto día de viaje, después de zarpar de Marmaris, una localidad de la sureña provincia de Mugla, para dirigirse a Fethiye dentro de una singladura por el Mediterráneo turco.
Los turistas rescatados fueron trasladados a un hotel de Fethiye tras recibir atención hospitalaria, y personal del Consulado de España en Estambul se desplazan al establecimiento a ayudarlos en las gestiones necesarias, ya que todas sus pertenencias y documentos se hundieron con el barco, informaron fuentes de la Embajada de España.