El presidente catalán, José Montilla, descartó este lunes la celebración de las elecciones autonómicas el 7 de noviembre por coincidir con la visita del Papa Benedicto XVI a Barcelona y ha criticado la ambigüedad de CiU y de su presidente, Artur Mas, por su posición respecto a la independencia de Cataluña. En declaraciones a COMRàdio, Montilla quiso desvelar la fecha de los comicios por «deferencia» y «lealtad institucional» al Govern y al presidente del Parlament, aunque avanzó que no se celebrarán el 7 de noviembre, cuando está prevista la visita del Papa Benedicto XVI a Barcelona.
Montilla ha aseverado que no se siente «presionado» y que tiene en cuenta el calendario de acontecimientos para fijar el día de los comicios y, en este sentido, ha precisado que el derby Barça-Madrid, que se disputa el 28 de noviembre, «no es incompatible» con la convocatoria de elecciones, por lo que no ha descartado esa fecha.
El presidente catalán, por otro lado, ha criticado la ambigüedad de CiU y de su presidente, Artur Mas, respecto a la posición de este partido sobre la independencia de Cataluña.
Montilla ha opinado que CiU tiene un «estilo de hacer política cada vez más radical» y que su líder, Artur Mas, que se presenta como el «cambio» en las próximas autonómicas de otoño, «no es ni el recambio» del ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol.
«No sabemos si quiere la independencia, no sabe lo que quiere -Artur Mas- ni cómo hacerlo, ha aseverado el presidente catalán, para añadir que el proyecto actual de CiU «se parece muy poco» al que dirigió Jordi Pujol por su «radicalidad» y su «poca precisión».
Precisamente, los últimos días los partidos políticos catalanes han puesto sobre la mesa el tema del soberanismo en un sentido u otro y, a este respecto, Montilla ha reiterado que el PSC apuesta por el proyecto del autogobierno y por avanzar hacia el federalismo.
Según Montilla, los comicios reflejarán los diferentes proyectos de las fuerzas políticas catalanas: «unos apuestan claramente por la independencia -en referencia a ERC-; los que parece que apuestan, pero no se sabe muy bien ni cuándo ni con quién- CiU-; otros quieren una vuelta al pasado -PPC-, que creen que el Estatut es una apuesta arriesgada y por eso lo recurrieron, y los que apostamos por un proyecto de autogobierno y desarrollo del Estatut».
Ha alertado asimismo que las «posiciones extremas» lo que hacen es «retroalimentar» al contrario y, en este punto, ha aseverado que «el españolismo rancio y casposo, con tics totalitarios que ha estado atacando Cataluña, el Estatut y la lengua … favorece que en Cataluña haya un rechazo hacia España».
Por otro lado, no ha querido pronunciarse sobre la reedición de un tercer tripartito porque, ha dicho, «yo aspiro a gobernar solo, y ha expresado su confianza en que el PSC puede ganar las elecciones a pesar de los pronósticos desfavorables de las encuestas.
«Yo a lo que aspiraré en la campaña es a tratar de explicar el trabajo hecho y lo que queremos hacer tanto a nivel de desarrollo del Estatut y del autogobierno como en políticas sociales, y a tener la mayoría suficiente para hacer viables estas propuestas (…) Me gustaría tener la mayoría suficiente para gobernar sin nadie, aspiro a gobernar solo, ha sentenciado el presidente catalán.
Respecto a la decisión del conseller de Economía, Antoni Castells, de no ir en las listas del PSC, Montilla ha asegurado «no estar molesto» porque, a su juicio, el PSC «siempre ha sido un partido plural que no está formado por clones».