La ministra de Sanidad y precandidata socialista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Trinidad Jiménez, ha dicho que «nunca» va a ponerse «en un papel de víctima públicamente» por una posible actuación no neutral de la dirección del Partido Socialista de Madrid (PSM) en las primarias.
En una entrevista en TVE recogida por Efe, Jiménez ha opinado que «entrar en ese tipo de debate no le importa a nadie, ni a los militantes ni desde luego a los ciudadanos madrileños, ha señalado que en política «hay que demostrar un poco de alegría y de ilusión» y ha avisado de que va a ganar «limpiamente» y «tranquilamente».
Por eso no le preocupa ni le interesa lo que pueda suceder por el reciente envío de mensajes de móvil a militantes del PSM y, aunque no entiende «el problema que se puede ver en eso, aceptará lo que decidan los órganos de garantías del partido.
Además, ha garantizado que no va «a dar pábulo a que parezca que en el Partido Socialista» están «enfrentados, por lo que no va a celebrar debates públicos con «el otro candidato, el secretario general del PSM, Tomás Gómez.
En este sentido ha declarado que no quiere hacer «una escenificación pública de debate con el otro candidato» porque los dos representan «los mismos valores» y no deben «dar bazas para regocijo de la derecha».
Trinidad Jiménez ha insistido en que «nadie cuestiona el liderazgo de Zapatero» en estas primarias y ha manifestado que «la correlación de fuerzas está muy igualada» entre ella y su adversario.
Preguntada sobre si está descuidando su actividad como ministra, Jiménez ha asegurado que no solo no la ha reducido sino que la ha acentuado y ha subrayado que supera «con creces cualquier actividad ministerial que pueda haber en otros lugares».