Vuelve el pulso entre la dirección nacional del PP y la dirección valenciana por culpa de la fecha de proclamación de Francisco Camps como candidato. Mientras Madrid la deja en vilo y elude plazos, en Valencia aumenta la desconfianza porque quiere que la ratificación sea cuanto antes.
El Partido Popular en la Comunidad Valenciana, tanto en público como en privado, maneja este mes como plazo, de modo que en las dos semanas que restan hasta el acto autonómico del primer fin de semana de marzo en Palma se produciría la ratificación de Camps por el comité electoral nacional, indican a Efe fuentes del PP valenciano.
Las direcciones nacional y autonómica del partido han hablado de ello, y así, la vicesecretaria de Organización, Ana Mato, conversó con integrantes de la cúpula del partido en Valencia este pasado fin de semana para acompasar los tiempos, han subrayado fuentes del PP en Madrid.
Pero con una salvedad: Génova no se ha comprometido a seguir el plazo por el que suspira Valencia.
Según indican las fuentes consultadas, Mato y la dirección del PP valenciano quedaron en que el comité electoral regional designaría a Camps antes de final de mes y que más tarde, sin más precisiones, el comité nacional se encargaría de dar el visto bueno.
Lo que no se esperaba en Génova es que la reunión del comité electoral regional fuera tan prematura, ayer mismo.
Trascendieron unas declaraciones de la secretaria general, María Dolores De Cospedal, que informaban de una reunión del comité nacional esta semana, pero no para ratificar a Camps, sino para ratificarla a ella como candidata en Castilla-La Mancha.
Unas horas después, el PP valenciano celebraba, con carácter de urgencia, la reunión de su comité electoral, y en Génova, dicen las fuentes, muchos entendieron que Valencia lanzaba un desafío a Madrid.
En definitiva, como ya sucedió con Ricardo Costa antes de quedar suspendido temporalmente de militancia, vuelve la tensión a las relaciones entre PP nacional y PP valenciano, concluyen altos cargos del Partido Popular.
En las dependencias de la sede del partido en la capital levantina se multiplican las suspicacias y crece la desconfianza, reconocen las fuentes consultadas del PP regional, pues toma cuerpo la impresión de que en Génova no está tan clara la apuesta por Camps a pesar de que, desde Mariano Rajoy a Ana Mato, todos los dirigentes respaldan su candidatura.
Influye, opina una fuente del PP nacional, la situación judicial del presidente de la Generalitat, a quien el juez del TSJCV José Flors podría citar en los próximos días para que se siente en el banquillo por un supuesto delito de cohecho impropio, el de la aceptación de unos trajes que le habrían regalado los muñidores de la trama Gürtel.
Las fuentes del PP en Valencia sitúan la decisión del magistrado entre los últimos días de este mes y los primeros del próximo.
Creen las fuentes consultadas que por esa razón la dirección nacional prefiere demorar la proclamación de Camps, en principio, si no cambian los planes, hasta la convocatoria oficial de las elecciones autonómicas, a finales de marzo.
Sin negar las sensaciones que circulan por el PP regional, fuentes de la dirección nacional manifiestan que Camps será el candidato con seguridad, sobre todo porque la causa de los trajes no le puede apear de la carrera.
Lo que preocupa en Génova es que a la instrucción de los trajes se sume la de una hipotética financiación ilegal del PP valenciano, y en ese caso sería «muy difícil» apostar por Camps.