El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó este domingo en Bilbao que a su partido «nadie le tiene que decir nada» en cuanto a la defensa de la participación electoral de la izquierda abertzale porque siempre lo ha defendido, «en el pasado, en el presente y en el futuro». En un encuentro con periodistas para presentar la implantación de una red wifi gratuita en los batozkis de Vizcaya, Urkullu no quiso opinar sobre la manifestación celebrada este sábado en Bilbao para exigir la legalización de la izquierda abertzale, en la que participaron varios cargos públicos del PNV, que no apoyó oficialmente la marcha.
El presidente del Euzkadi Buru Batzar (EBB) mostró su hartazgo por el protagonismo de la izquierda abertzale en la política vasca y se mostró convencido de que hasta el 22 de mayo, cuando se celebran las elecciones municipales y forales, sólo se hablará de los «planes A, B o C» de la izquierda abertzale para concurrir a los comicios.
Urkullu aseguró que la manifestación de este sábado «no es un motivo de preocupación para el PNV» y reclamó que se legalice a Sortu y que no sea necesario «el plan B o C».
El presidente del EBB, que hasta ahora siempre se había mostrado convencido de que la izquierda abertzale concurriría de una forma u otra a las elecciones municipales, dijo este domingo que «da que pensar» que el presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, dijera hace semanas en una entrevista que la izquierda abertzale sería legal para las elecciones al Parlamento vasco, que agota su legislatura en la primavera de 2013.
Urkullu recordó que en esa entrevista Eguiguren «acertó en algunas cosas», como la fecha del anuncio del alto el fuego de ETA, por lo que podría acertar también con la fecha de la legalización de la izquierda abertzale.
«Debe ser cuanto antes, para estas elecciones», exigió antes de subrayar que la legalización de la izquierda abertzale puede ser «muy importante», pero no por ello hay que «despistarse» de los problemas que afectan a los ciudadanos porque «eso no soluciona el paro ni la crisis económica».
En cuanto a la reunión mantenida por el presidente del PNV de Guipúzcoa, Joseba Egibar, y el exlehendakari Juan José Ibarretxe con una delegación de Batasuna encabezada por Rufi Etxeberria, Urkullu manifestó que no tiene «nada que decir» porque su costumbre «no es hablar de compañeros del partido si no es para ensalzarles».
Redacción