La iniciativa Juventud SIN Futuro se manifestará este jueves 7 de abril en Madrid contra la política de recortes sociales del Gobierno y la que, a su juicio, es la consecuencia «más grave y con mayor impacto en el futuro que representan estas medidas: la juventud más preparada de la historia de España vivirá peor que sus padres», según ha indicado la iniciativa.
Así, Juventud SIN Futuro ha concretado que la manifestación se celebrará en la Plaza de Antón Martín y ha afirmado que «en un contexto de precariedad y mercantilización de la educación, con una tasa de paro juvenil del 40 por ciento, el conflicto social está asegurado», al tiempo que ha añadido que esta situación «requiere una respuesta» por su parte.
Además, ha indicado que «son conscientes de que la movilización es necesaria y tiene sentido». En un manifiesto, la iniciativa ha denunciado que «la agresión contra la juventud en un escenario de crisis capitalista se materializa en la reforma laboral, que aumenta la temporalidad de los contratos de los jóvenes y supone la desaparición de la negociación colectiva; en la reforma del sistema de pensiones, que retrasa la edad de jubilación y reduce la cuantía de las pensiones futuras; y en la mercantilización de la Educación pública, que apuesta por la rentabilidad privada y no por la formación y el conocimiento».
De esta manera, ha añadido que «la generación precaria señala a los culpables y reivindica ser escuchada», así como que «quiere recuperar su capacidad para ser actores del cambio, combatiendo un país de precariedad, desempleo y privatización educativa». También ha defendido que las revueltas en el mundo árabe «demuestran que la victoria es posible».
Finalmente, la iniciativa, que cuenta con el apoyo de más de 120 firmantes, entre los que se encuentran jóvenes, actores, profesores universitarios, escritores, científicos o asociaciones, ha llamado a la ciudadanía a un ciclo de movilizaciones «que recupere la voz de la juventud en la calle». «Instamos a emprender la movilización colectiva, a reivindicar nuestro derecho a disentir y a reconstruir nuestro futuro», concluye el manifiesto.
Redacción