Necesitaremos un buen bacalao desalado, puede ser congelado, preferentemente de Islandia aprox. 500gr
Trocearlo en 4 trozos y confitarlo en una olla mediana
( confitar: cocer en aceite, a fuego lento unos 20 min.)
Sacarlo y dejarlo escurrir
Para la salsa necesitamos,
500 ml de fumé de pescado, si no tenemos tiempo, puede ser comprado, pero siempre es siempre es mejor hacer uno propio
500 ml nata liquida para cocinar
2 chalotas o cebollas frescas
5 gr de azafrán
Preparación:
Una sartén amplia sofreímos las chalotas con mucho cuidado, no se deben quemar, simplemente dorarlas, añadimos el fumé y la nata, dejar cocer a fuego lento unos 20 min., por último añadimos el azafrán, dejarlo calentar hasta que obtenemos este color tan característico.
Emplatar:
Plato hondo, colocar el bacalao y napamos generosamente con la salsa, decoramos con cebollín picado, a los que no les gusta el sabor a cebolla, podríamos decorarlo con unos pimientos rojos, previamente cortados, sofritos y bien escurridos.
Así aportamos un colorido especial.
La decoración de los platos es fundamental, acuérdense usted de la ya tan famosa frase: Se come con los ojos.
Patricia Gallet (jefa de cocina) del restaurante El Palacete de Toledo.
Redacción