La presidenta de la Comunidad de Madrid y aspirante a la reelección por el PP, Esperanza Aguirre, y el candidato socialista, Tomás Gómez, han contrapuesto hoy su defensa de la libertad de elección para el ciudadano y el modelo público durante un debate electoral. La cadena autonómica Telemadrid ha sido el vehículo a través del cual Aguirre, Gómez y el candidato de IU, Gregorio Gordo, han explicado sus propuestas en tres «cara a cara» sucesivos, ya que la presidenta madrileña no ha querido aceptar un formato entre los tres al mismo tiempo.
El debate ha carecido de anuncios novedosos y de momentos de tensión, salvo cuando el aspirante socialista ha acusado a Aguirre que querer instaurar un sistema de copago de algunos servicios sanitarios si revalida su mayoría el 22 de mayo. «Es falso, usted miente. Es una ignominia que quiera asustar a la gente», ha dicho Aguirre a su rival socialista, quien ha exhibido una circular enviada por el Gobierno regional a 79 residencias de mayores en las que se les pide que dejen de comprar pañales absorbentes para sus pacientes, que se sumaría al copago en prestaciones como las vacunas o el tratamiento de la diabetes.
La dirigente popular ha reivindicado sus ocho años de gobierno, traducidos en cifras como la construcción de 347 colegios públicos, ocho hospitales, 75 centros de salud, 86 estaciones de metro y un centenar de kilómetros de carreteras convertidos en autovías. Al margen de esos logros, se ha dedicado a criticar la política del Gobierno central para echar abajo la argumentación del candidato socialista.
También ha pedido a Gómez y a Gordo que tengan el valor de presentarse juntos, ya que les atribuye la intención de unirse tras el 22 de mayo, para pactar un gobierno conjunto en el caso de que el PP no tenga mayoría absoluta. Gómez ha criticado, a su vez, la «hemorragia» privatizadora que, a su juicio, impulsan los populares en la región madrileña y ha defendido el sector público en sanidad, educación, atención a los dependientes y economía, de modo que contribuya a ayudar a los más desfavorecidos, aparte de ser un motor para la recuperación económica y la creación de empleo.
Gómez apenas ha criticado a Gordo y ha hecho guiños al voto de izquierda, con una invitación a los ciudadanos progresistas a «acabar con el monopolio de la derecha de Madrid, la más reaccionaria de España». El candidato de IU ha pedido a Gómez que no hable de una presunta unidad de la izquierda y que no invoque un eventual «voto del miedo» como el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que después sólo sirve para aplicar políticas de derecha».
Redacción