Los cerca de 400 «indignados» que se encontraban en la plaza Catalunya de Barcelona en el momento en que un fuerte dispositivo policial ha irrumpido en el lugar para que los equipos de limpieza actuaran en la zona han procedido a sentarse en medio de la plaza y se niegan a abandonar el lugar.
Más de medio centenar de furgonetas y decenas de agentes de los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana se han apostado en la plaza Catalunya y sus inmediaciones, y han formado un cordón que ha aislado a los acampados en el centro de la plaza y que impide a nadie entrar en el área para sumarse a ellos, según ha podido comprobar Efe.
Alguna persona que ha intentado romper el cerco y sumarse a la sentada ha sido retenida por los agentes que forman el cerco policial. Mientras, las brigadas de limpieza están desmontando las carpas, carteles y pancartas instaladas en el lugar, además de llevarse algunos objetos personales, como ordenadores, que son introducidos en camiones, los acampados han procedido a protestar por la actuación con gritos como «esto es un desalojo, esto no es limpieza» o «esta es su democracia».
Según ha informado un portavoz de los Mossos d’Esquadra, los agentes se han desplegado en la plaza Catalunya para dar cobertura a las brigadas que están limpiando la zona por «motivos de salubridad». Los equipos de limpieza tienen instrucciones también para retirar objetos susceptibles de ser utilizados en caso de que se produzcan disturbios mañana tras la final de la Liga de Campeones.
Por ello, según este portavoz, se ha instado a los cerca de 400 acampados a desalojar momentáneamente la plaza para propiciar estos trabajos y a que, si quieren permanecer en ella, lo hagan sólo con sus sacos de dormir, sin ningún objeto o estructura que puedan entrañar algún peligro mañana.
Estrella Digital/Efe