Dos clínicas médicas ilegales situadas en Dénia y otra más de Jávea han sido clausuradas por la Guardia Civil en una operación que se ha saldado con el arresto de cinco personas que ejercían como médicos sin cualificación.
Según fuentes de la investigación, a los detenidos, tres de Alemania, uno de China y otro de Grecia, se les imputan los presuntos delitos de intrusismo profesional, contra la salud pública por suministro de medicamentos ilegales y de estafa.
Los cinco han prestado declaración en el Juzgado de Instrucción número 1 de Dénia y han quedado en libertad con cargos a la espera de juicio.
Desarrollada por la Guardia Civil de Moraira, la operación «Bata blanca» se inició el 17 de noviembre de 2010, cuando se detuvo en Jávea a dos mujeres de 60 años, una griega y una alemana, por ejercer como médicos en un centro terapéutico, sin cualificación y donde ofrecían medicamentos sin etiquetas.
Ese día se llevó a cabo la inspección de la clínica, en una acción conjunta con la Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valenciana, y se incautó diverso instrumental médico y quirúrgico, además de los medicamentos.
Posteriormente, el 7 de febrero de 2011 se detuvo en una clínica en Dénia a un ciudadano chino, de 64 años y originario de Pekín, por realizar tratamientos no homologados, acupuntura y por ofrecerse como curador de enfermedades graves, como cáncer y esclerosis.
Asimismo, en otra clínica de Dénia también se ha arrestado a un alemán de 51 años, quien no figuraba como colegiado ni titulado pese a lo cual ejercía de médico.
Éste último ejercía en una clínica que fue clausurada por la Conselleria de Sanidad y en la que había otra consulta donde también trabajaba otro alemán, de 66 años, que es el quinto arrestado.
Los materiales y medicamentos decomisados en el marco de la operación han sido depositados en la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, a la espera de lo que decida la autoridad judicial.
Estrella Digital / EFE