El Tribunal Supremo (TS) decide este miércoles si mantiene la suspensión cautelar parcial que pesa sobre el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) del parque natural de Cabo de Gata-Níjar desde que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) estimó que el nivel de protección dado al paraje de El Algarrobico como «núcleo habitado existente o zona transformada» dejaba la puerta abierta a la rehabilitación de inmuebles con uso turístico y, por tanto, «uso efectivo» del hotel de Azata del Sol con «efecto devastador» medioambiental.
La Junta de Andalucía interpuso en noviembre de 2008 un recurso de casación contra el auto dictado por el Alto Tribunal andaluz y desde la Consejería de Medio Ambiente se defendió la nueva regulación como un «refuerzo de la protección de este espacio natural» almeriense que, según añadió, permitiría en su momento la demolición del edificio de una veintena de plantas y 411 habitaciones.
La Sección Quinta de la Sala de lo Contencioso-administrativo del TS será la encargada de someter a votación y fallo el asunto. El ponente de la sentencia será el magistrado Jesús Ernesto Peces Morate, al que acompañan en el tribunal los magistrados Mariano de Oro Pulido, Jorge Rodríguez-Zapata, Rafael Fernández Valverde, Eduardo Calvo Rojas y María del Pilar Teso.
El auto de medidas cautelares acordado por el TSJA para suspender parcialmente el PORN aprobado en febrero de 2008 ordenaba a la Junta de Andalucía que mantuviese el grado de protección que tenía el paraje de El Algarrobico en la anterior regulación, que se remonta a 1994, y especificada en la planimetría publicada en el BOJA en ese año, tal y como reclamaba Greenpeace en su recurso de apelación.
Precisamente, la categoría asignada al suelo donde se levanta el hotel es objeto de litigio en otro proceso seguido en el Alto Tribunal andaluz después de que un juez de Almería estimase «clamoroso» en un fallo dictado el 5 de septiembre de hace tres años que la zona era «no urbanizable», en contra de lo que sostiene la Administración andaluza, que lo sitúa en zona D2 o zona «no incompatible con el uso urbanístico».
«Efecto devastador»
El auto por el que el TSJA ordenó la suspensión cautelar parcial del PORN se avino a los argumentos expuestos por el colectivo conservacionista en su recurso ya que, según argumentó el tribunal, la clasificación C3 dada al paraje de El Algarrobico podía «plantear la posible producción de un efecto devastador en relación a la construcción y utilización del hotel promovido por Azata del Sol y que es objeto de diversos procedimientos judiciales».
De este modo, desestimó el criterio esgrimido desde la Consejería de Medio Ambiente que señalaba que el artículo 5.4.3.3 que se refiere a los usos y actividades permitidos en las zonas C3 recogía como «salvedad» las zonas alteradas por la explotación minera y otras zonas degradadas al tiempo que criticó la indefinición de esas excepciones que, a juicio del TSJA, debería tener una «remisión expresa a El Algarrobico».
El auto del TSJA concluía considerando «acertada» la suspensión del PORN en lo referido al sector donde se ubica el hotel para evitar, en el caso de una eventual sentencia estimatoria en el contencioso-administrativo, «gravísimos e irreparables perjuicios al medio ambiente» derivados de la consolidación del establecimiento turístico.
El juez de Almería que ordenó en febrero de 2006 la paralización cautelar de las obras del hotel de Azata del Sol en el paraje de El Algarrobico (Carboneras) declaró en una resolución fechada el 5 de septiembre de 2008 la nulidad de la licencia municipal del hotel concedida por el Ayuntamiento de Carboneras.
La sentencia aseguraba, asimismo, que la Junta de Andalucía realizó lo que tildaba como «una burda maniobra» para sustituir la planimetría del PORN publicada oficialmente en BOJA en 1994 por otra para «orillar la limitación que imponía» y «permitir de esta guisa» la obra del hotel en terrenos de especial protección.
El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) anunció hace unos días que, en colaboración con la Junta de Andalucía, había comenzado a redactar un convenio bilateral en el que se plasmará las competencias de cada administración a la hora de demoler el hotel y restaurar el entorno enclavado en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar una vez exista pronunciamiento judicial.
Según los primeros datos que han trascendido del acuerdo, el departamento que dirige la ministra Rosa Aguilar se ocuparía de la demolición del hotel, mientras que la Junta de Andalucía sería la encargada de gestionar los residuos que provocara dicha demolición y, posteriormente, de reconstituir el paraje. El MARM prepara, asimismo, un plan de empleo para la zona.