El portavoz del grupo parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, Alfonso Alonso, ha reclamado al lehendakari Patxi López que centre la presión sobre ETA y no sobre el Gobierno de Mariano Rajoy ya que la banda terrorista aún no se ha disuelto y por lo tanto sigue siendo una «amenaza latente».
Alonso responde así a las palabras del lehendakari que trasladará al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que se puede poner en marcha «ya» el acercamiento de presos, terceros grados y excarcelación de reclusos enfermos, «sin vulnerar ningún principio legal ni de justicia» y con «voluntad política» por parte del Ejecutivo del PP.
El portavoz del grupo parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados ha puntualizado que en España «no hay presos políticos» y ha indicado que espera que López «como todos» quiera que se cumpla la ley con los presos de ETA.
«No puede haber y no cabe, es razonable que sea, así un tratamiento colectivo sobre los presos sino que se les atienda de manera individualizada y según la previsiones que la ley tiene», ha concretado en una entrevista a RNE recogida por Europa Press.
En este sentido, ha reclamado al lehendakari que centre «la presión sobre el hecho de que ETA aún no se ha disuelto» y «sigue siendo una amenaza latente». «No se puede trasladar la presión sobre el Gobierno sobre la sociedad democrática, la presión sigue estando sobre ETA y sigue estando sobre aquellos que han combatido contra la democracia», ha subrayado.
«Rechazo que se haga presión sobre el gobierno o que se le marque la responsabilidad de: oiga si usted no hace un trato de favor a los presos de ETA a lo mejor no hay paz. Que amenaza es ésa en qué situación estamos. Todo este debate esta envenenando por la razón que ETA sigue existiendo y en la medida en la que exista es una amenaza», ha declarado.
Sobre la formación abertzale Amaiur, Alonso ha criticado que estos diputados «se pongan la piel de cordero para venir a Madrid» ya que «no cuela» pues todo el mundo conoce su trayectoria y la historia de muchos de estos representantes.
«Ahora están en Madrid y muestran el lado mas amable y la piel de cordero pero siguen sin condenar el terrorismo siguen sin pedir la disolución de ETA y sigue sin ser creíble realmente que ellos hayan apostado por la democracia por una actitud respetuosa con los derechos y las libertades más allá que una posición táctica», ha valorado.