La victoria de Rubalcaba en el congreso del PSOE deja a muchos descolocados, buscando la salida. Uno de ellos es el secretario general de PSOE de Castilla-La Mancha, José María Barreda, quien, nada más conocer el resultado de la votación, se ha marchado del hotel. «Ha salido por la puerta de atrás, -literalmente-«, nos cuentan, y ni siquiera ha atendido a la prensa de su comunidad. Quien ha ejercido de portavoz ante los medios, en representación de la delegación de Ciudad Real, ha sido la secretaria de comunicación del psoe regional, Esther Padilla.
Fuentes del partido socialista de CLM confirman a Estrella Digital que el secretario de los socialistas castellano-manchegos salió del hotel durante «una hora u hora y media» cuando se supo el resultado, y «después volvió». «De hecho, a esta hora (23.49) mis noticias son que sigue allí».
Barreda se declaró partidario de Carme Chacón al inicio de la contienda por el liderazgo general. Ya apuntó maneras cuando aún era presidente del Castilla-La Mancha y el cántabro estaba en el Gobierno central. En su día dijo de ella que tenía mucho presente, pero sobre todo, «mucho futuro». Y, cuando la catalana hizo oficial su candidatura, el manchego se decantó por ella. No sólo eso. Indicó a los delegados de Ciudad Real que sus votos iban para Chacón.
En Castilla-La Mancha no todos los delegados pensaban como Barreda. Sin ir más lejos, Emiliano García-Page, alcalde de Toledo y secretario provincial del PSOE, señaló el pasado jueves que «la inmensa mayoría de su provincia estaba con Rubalcaba».
El triunfo del exvicepresidente unido al inminente Congreso Regional del PSOE de CLM, que se celebrará a finales de mes, y del que, muy probablemente saldrá como líder García-Page, deja en una situación muy complicada a Barreda. Tanto es así que hace días, Nemesio de Lara, presidente de la Diputación de Ciudad Real, anunciaba que el regidor toledano tendría una candidatura alternativa en la región.