Uno de cada cuatro españoles, el 25,5%, se encontraba en riesgo de pobreza en 2010, lo que supone un aumento de 2,1 puntos respecto al año precedente, cuando la proporción fue del 23,4%, según los datos divulgados este miércoles por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.
En 2010, en España había unos 11,6 millones de personas en riesgo de pobreza, del total de 115,4 millones de ciudadanos europeos que se encontraban en dicha situación (el 23,4 % de la población total).
En el conjunto de los Veintisiete, la proporción de personas consideradas en riesgo de pobreza aumentó 0,3 puntos entre 2009 y 2010, una subida más leve que la registrada en España.
Eurostat considera «en riesgo de pobreza» a aquellas personas cuyos ingresos son menores al 60% de la media nacional, que padecen una «grave privación material» (sus recursos les impiden pagar un alquiler o adquirir ciertos bienes básicos) o que han utilizado menos del 20% de su «potencial de trabajo» en el último año, sin contar a los estudiantes.
España era en 2010 el octavo país de la UE con mayor proporción de la población en riesgo de pobreza: el 20,7% cumplía el primero de estos criterios de pobreza, el 4,0% el segundo y el 9,8% el tercero.
La proporción total de personas en riesgo de pobreza es inferior a la suma de los tres porcentajes, ya que algunas personas cumplen varios criterios a la vez, precisa Eurostat.
De entre los Estados miembros con datos disponibles, las mayores tasas de pobreza se observaron en Bulgaria (42%), Rumanía (41%), Letonia (38%) y Lituania (33%).