La Fiscalía de Madrid ha ordenado a la Guardia Civil el precinto y custodia de los restos ferroviarios hallados en un almacén del distrito de Villaverde, en Madrid, que podrían corresponder con parte de los trenes que sufrieron los atentados del 11-M y si su hallazgo pudiera suponer «un delito de obstrucción a la Administración de Justicia».
La orden ha sido dada por el fiscal provincial de Madrid, Eduardo Esteban, una semana después de que el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, hiciera público que había ordenado investigar la aparición de estos restos, cuyo hallazgo fue conocido por informaciones periodísticas.
Fuentes de la Fiscalía General del Estado han confirmado que el precinto es consecuencia directa de la comunicación realizada por Torres-Dulce a la Fiscalía Provincial de Madrid y descartaron que, por el momento, se hayan adoptado otras medidas como la recogida de muestras.
Durante un desayuno informativo celebrado el pasado 2 de marzo, Torres-Dulce manifestó que si el hallazgo de los restos se estuviera investigando en un proceso el Ministerio Público archivaría sus diligencias de investigación y actuaría en la causa que ya estuviera abierta. «De no ser así, agotaríamos las diligencias de investigación con el objetivo que estamos precisando y a continuación solicitaríamos la inmediata judicialización», explicó.
Tras indicar que «no hay por parte del Ministerio Fiscal a la hora de investigar nada que no sea revocar los hechos probados de la sentencia, que están ahí concretamente», el fiscal general del Estado defendió en dicha ocasión la necesidad de «indagar cualquier otro término que pudiera suponer un delito de obstrucción a la Administración de justicia».
«El Ministerio Fiscal no tiene solamente ningún inconveniente sino que tiene la obligación de llegar hasta el fin en esas investigaciones», señaló el fiscal general del Estado antes de añadir que, aunque el 11-M es «un proceso cerrado», «cualquier otra circunstancia que merezca ser investigada será investigada».