La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se enfrenta al día de su Comunidad teniendo que dar la cara por su número dos, Ignacio González. La defensa de la presidenta es rotunda: «Pondría la mano en el fuego por él». Pero además, justifica que en caso de haber cometido un hecho «delictivo» o «incorrecto», no le «temblaría el pulso» a la hora de cesarle. Aguirre asegura en una entrevista a la Cadena SER que lo que hizo Pilar Velasco fue publicar las imágenes de que alguien espiaba a Ignacio González y eso ha dicho un juez que es delito. La imputación no la hace Ignacio González, la hace el juez. Nosotros no sabemos aún quien espiaba a Ignacio González cuando se publicaron esas imágenes quizá esta periodista pensaba que lo hacía rozando la legalidad, pero no pasa nada, imputarte no es condenarte».
«Aquí estamos para luchar por los principios y apoyar a la gente que lo hace bien y no atender a las maledicientes. Las insidias no pueden tener un premio. Creo en el periodismo de investigación y creo que muchas veces a través de la prensa se han puesto de manifiesto cuestiones que los políticos no sabían. Esto es la parte muy positiva de la prensa», ha resuelto.
A continuación, Aguirre ha calificado de «poco serio» de procedimiento judicial por el que se investiga el supuesto espionaje al vicepresidente regional en su viaje oficial a Colombia. «Lo denuncia y lleva ya cuatro años esperando. Se sabe qué agencias de detectives fue pero no se sabe quién las encargó, porque no se lo dicen al juez».
Pide la revisión del Estado Autonómico
Aguirre cree que la política económica del Gobierno de la Nación «va bien encaminada, está haciendo lo que tiene que hacer y es lo que había que haber hecho hace mucho». «Quitar lo que se ha dado es más difícil pero no hay más remedio que hacerlo. Quizá la medicina se puede dar más de golpe que en pequeñas dosis», ha apostillado.
Preguntada por las supuestas preferencias de algún miembro del Ejecutivo central de la victoria de Francois Hollande en Francia, la dirigente autonómica ha manifestado que «puede que haya algún ministro socialdemócrata» en el Gobierno de España, «pero en el de la Comunidad de Madrid no». «Hollande cree como Obama y todos estos que puede hacer un plan de reactivación, que es gastar más que se ingresa y que es lo que ya hizo Zapatero», ha esgrimido.
La presidenta madrileña ha vuelto a pedir una revisión del Estado autonómico ya que «cualquiera que nos mira sin conocer el sistema piensa que si somos suficientemente ricos para mantener 17 comunidades, que son como miniestados, porque hay competencias legislativas para casi todo». Le atribuye a este sistema el aumento del número de funcionarios y el encarecimiento de la gestión de los servicios.
«El Estado autonómico se crea para tratar de integrar mejor a Cataluña y País Vasco, que no se ha conseguido por desgracia. Aunque ningún político me ha apoyado, todos saben que hay que reflexionar sobre esto. No hay remedio que ahorrar en Administración», ha reconocido.
Banderas republicanas e ikurriñas el Día del Trabajador
En otro orden de cosas, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha reprochado a los dos exministros socialistas que este martes acudieran a la manifestación del 1 de Mayo «después de dejar el Gobierno con más de cinco millones de parados». «España ha tenido una malísima gestión. No tengo animadversión contra Zapatero, pero como presidente ha sido una catástrofe. Lo que es duro es que no haya empleo», ha agregado.
También ha cargado contra los sindicatos por no alcanzar a principios de año un pacto con la patronal sobre la reforma laboral «pensando que el Gobierno no iba a gobernar». «Y cuando llega la reforma laboral, que nos piden de todos los lados, actúan como pirómanos que protestan cuando llegan los bomberos», ha añadido.
Esperanza Aguirre ha asegurado que en las marchas sindicales «ya no salen ni los liberados» y que los que se manifestaron ayer no conseguirían «ni un concejal en Madrid». «Para salir concejal en Madrid hay que llenar el Bernabéu tres veces con gente distinta», ha argumentado.
La presidenta regional considera que «si no hay piquetes o coacción no hay movilización» y aunque tiene «un gran respecto» por los líderes sindicales nacionales, ha afirmado que «tienen que cambiar, porque de esta manera no van a hacer nada o si no caerán como el muro de Berlín».
Eso sí, ha advertido que este miércoles no atenderá a los representantes sindicales madrileños que le van a entregar una carta de queja, tras renunciar a acudir al acto institucional del Día de la Comunidad. «Que pasen por registro, pero hoy no estoy para leer cartas», les ha dicho.
Aguirre ha dicho que España no puede dar una imagen de «quema de contenedores y algarada, a la griega», porque, a su juicio, no contribuye a salir de la situación económica en la que se encuentra. Frente a ello, ha destacado que hay que dar una imagen de confianza en el país.
«Somos la misma España que consiguió en una año cumplir todos los criterios de entrar en el déficit, la misma que tenía menos paro que en Alemania antes de entrar en la crisis. Cuando el PP llegó al Gobierno (en 1996) teníamos el 23 por ciento de paro y cuando nos fuimos estábamos en el 11 y se crearon 5 millones de empleos. Somos los mismos y tenemos que salir adelante, pero tenemos que proyectar una imagen de país serio, no de algarada», ha agregado
En este sentido, Aguirre ha criticado que en las manifestaciones del Día del Trabajo de este martes hubiera banderas republicanas «e ikurriñas» porque, a su juicio, en estos momentos de crisis económica, los españoles «tiene que proyectar una imagen de lo que nos une, como es la bandera española, que el signo de unión entre todos».
Critica los 400 euros a los parados
Por otra parte, Aguirre ha defendido los recortes del Gobierno central y ha criticado las recetas «keynesianas y de superávit» del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, con medidas como el Plan E y 400 euros. Así, ahora, ha recordado que España tiene que pagar 29.000 millones de euros sólo por los intereses de la deuda y tiene que pedir otros 57.000 millones tenemos que pedir para el déficit de este año.
«El pago de intereses nos come y para evitar eso tenemos que hacer que para mantener lo esencial habrá que recortar otra cosas. Esos mercados tan malísimos son los que nos prestan y si no podíamos pagar las nóminas y los servicios públicos», ha manifestado la dirigente autonómica.
Preguntada por si cerraría algún hospital público como media de recorte, Aguirre ha señalado que no le gustaría llegar a ese extremo, aunque ha apuntado que quizá pudieran habilitarse dos camas por habitación en vez de las habituaciones individuales. Además, ha recordado que durante su mandato ha abierto doce hospitales «y eso es un costo muy importante»
La líder del PP madrileño ha argumentado que «quedan sectores para recortar». Entre sus ideas aparece dejar de pagar los másteres para personas adineradas o no dar más del 50 por ciento de subvenciones a las ONGs. Asimismo, ha revelado que todos los viernes por la mañana tiene una reunión para saber de dónde más se puede recortar. «He encontrado unas partidas maravillosas», ha indicado.
En este capítulo, ha manifestado que Telemadrid «es un gasto que no se puede permitir» la Comunidad, por lo que ha abogado por sacarla a concurso o vender las acciones. «Habrá grupos interesados (en comprarla), seguro que sí», ha augurado.
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