Veinte millones de euros al año para publicitar lo que carece de competencia. A eso dedica el dinero público la Comunidad madrileña. Hablamos de Metro de Madrid y del Canal de Isabel II. Quizá los ciudadanos madrileños puedan escoger cada mañana entre desplazarse a su lugar de trabajo en metro, autobús, cercanías o transporte privado. Pero si eligen el metro sólo pueden elegir uno: Metro de Madrid. Del mismo modo, quizá cada mañana quieran escoger si beber agua o no, pero si deciden abrir el grifo, sólo puede beber una: la del Canal de Isabel II. Y no hay más opción.
Competencia; la mínima porque no existe. Sin embargo, la Comunidad de Madrid, tal y como publica el BOE, gasta 1,2 millones de euros al año para la producción de campañas publicitarias de Metro de Madrid, 13,3 millones de euros para su difusión y 4,5 millones de euros para la gestión y comunicación de las campañas del Canal de Isabel II.
En total, casi 20 millones de euros en publicidad que contrasta con la decisión del Gobierno central de reducir un 56% el presupuesto destinado a la comunicación institucional y el 38% a la publicidad comercial. Mientras el Estado ahorra, Madrid gasta. Un aforismo que no cae bien entre los madrileños que están viviendo la mayor subida de las tarifas de Metro en diez años: un 11% y sobre los que ahora ronronea pagar un peaje por utilizar las carreteras.
Mantener la red de transporte madrileña cuesta 2.500 millones al año y la Comunidad pretende que los ciudadanos asuman el 50% a través de esa subida de precios. El otro 50% lo asumirá la propia administración regional.
Mientras que Madrid pide este esfuerzo extra a los viajeros y el Ejecutivo de Rajoy destina mensualmente 12 millones de euros a la Red de Metro, la Comunidad utiliza 15 millones para gastárselos en publicidad. Pero en el otro extremo y, obligados por la desgastada situación económica, está el Transporte Metropolitano de Barcelona: «Prácticamente no hay partidas destinadas a campañas publicitarias por la menor disponibilidad de recursos de la compañía», asegura un portavoz a ESTRELLA DIGITAL.
Metro de Madrid gasta en publicidad lo mismo que Renfe
Acentúa más este derroche madrileño que el Ministerio de Fomento destine también otros 15 millones de euros a publicitar Renfe. La misma partida económica, pero para un servicio que recorre todo el país y suma 14.000 kilómetros de vía, frente a los 324 kilómetros de vía de Metro de Madrid. Un servicio estatal que se enfrenta al ‘Low Cost’ de las compañías aéreas.
Tras esta cuantía se presupone que pronto se podrán ver los anuncios de Metro de Madrid en la prensa elegida por la Comunidad de Aguirre y en Telemadrid. Un ente que factura la publicidad a través de Multipark Madrid. Esta empresa pública presidida por el actual presidente de la cadena autonómica madrileña, está formada por Caja Madrid con un 30%, Boomerang TV con otro 35% y Telemadrid con un 35%. Lo que puede significar que parte de los beneficios publicitarios de Metro de Madrid y del Canal de Isabel II también se los podría llevar el propio ente público.
CYII, el agua de todos que pronto será de algunos
Cuando el Canal de Isabel II está en la recta final de su privatización, la empresa pública destina 4,5 millones de euros en la gestión y contratación de las campañas de comunicación. Casi 1,5 millones más de euros de lo que invirtió en 2010 para la creatividad de las campañas de comunicación del Canal.
Ignacio González ya lo dijo el pasado mes de febrero en el diario ABC: «Es muy probable que la privatización se ponga en marcha antes del verano». Y esas fechas están aquí. La administración duplica la partida publicitaria, quizá como una llamada a los nuevos inversores que vendrán a hacerse con el 49% de la empresa pública del agua. Una empresa que tiene previsto dos posibles embalses más a la espera de que el Ejecutivo central revise la política hidrográfica.
En el momento en que parte del Canal pase a manos privadas, habrá qué mirar qué parte del dinero público patrocinará el agua que pertenecía a los madrileños.
Eva Díaz