El candidato de Foro, Francisco Álvarez-Cascos, ha dicho que «cuesta trabajo imaginar que pueda haber un acuerdo» con UPyD si el diputado de esta formación, Ignacio Prendes, asume la línea de un programa continuista que, a su juicio, representa el PSOE. «O hay acuerdo con un programa de cambio o no, y este es incompatible con un programa continuista», ha expresado.
Cascos se ha reunido este viernes por quinta vez con la candidata del PP, Mercedes Fernández, quien se ha ofrecido a apoyarle en la investidura, siempre y cuando éste obtenga el respaldo de la formación de Rosa Díez, en aras a la constitución de un Gobierno estable.
De este modo, Álvarez-Cascos ha anunciado que esta tarde trasladará a la Comisión Directiva de Foro la propuesta y, a continuación, contactará con el parlamentario de la formación magenta, que este jueves dio por frustradas las negociaciones con el PSOE por la negativa de este a reformar la ley electoral asturiana.
El actual jefe del Ejecutivo en funciones ha explicado que la propuesta se articula de este modo en tres dimensiones «inseparables» que pasarían por la constitución de un acuerdo de legislatura, en lugar del gobierno de coalición propuesto por Foro; un programa que pasaría ser defendido por los 22 parlamentarios que suman PP y Foro y un eventual acuerdo con UPyD, cuyo voto pasa a ser ahora «decisivo».
Pese a todo, ha considerado que lo más relevante y sorprendente son los detalles del acuerdo «casi total» alcanzado por el PSOE y UPyD sobre un programa que, reiteró, será continuista.
Ley electoral asturiana
De este modo, ha restado relevancia al escollo insalvable que para UPyD constituye la negativa del PSOE a modificar la ley electoral para dejar al Principado con una única circunscripción. «Mucho más relevante es saber si se negocian políticas continuistas o se compromete el apoyo a una política de cambio» y «sobre este punto versará el eje de las negociaciones», ha incidido, antes de apuntar que «no se saca a Asturias de la decadencia con un cambio de la ley electoral».
No obstante, el presidente ha aclarado que ningún órgano directivo de Foro ha debatido sobre una posible reforma de dicha ley, donde cada uno es «rehén de sus compromisos».Al respecto, ha recordado que el texto fue aprobado en 1986 a iniciativa de Alianza Popular y con el apoyo de todos los que formaban parte de aquel Parlamento. Del mismo modo, ha opinado que el modelo que concede distinto peso en el reparto de escaños «no es reprochable» y una potencial modificación debería ser negociada y consensuada por todos los partidos. «Sin consenso de todos no soy partidario de proponérselo a mi grupo», ha zanjado.
Casi en último término, el líder de Foro ha señalado que no está disputando ninguna carrera para llegar a la investidura y ha adelantado que, llegado el caso, hará oposición a quien ahonde en el continuismo de Asturias.
Para concluir, y a preguntas de los periodistas ha desvinculado la oferta del PP del fallo del Constitucional y, sobre la presidencia de Mercedes Fernández, ha reiterado que «no hay ninguna razón política para que el que tiene menor representación tenga mayor responsabilidad» y ninguna razón, por ende, para que Foro ceda en el empeño de ostentar la Presidencia de un gobierno de centro derecha.