El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha acusado al Gobierno de estar sufriendo un «ataque de soberbia fruto de la mayoría parlamentaria» y de no haber negociado con la oposición ni la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado ni la reforma financiera o ni las renovaciones institucionales pendientes, especialmente en la de RTVE.
«Son lentejas, si quieres las tomas y si no las dejas», ha dicho en una entrevista en RNE en la que ha advertido al Ejecutivo de que ese «es un mal mecanismo para gobernar». «Tienen mayoría absoluta pero no es la forma de hacer las cosas», ha dicho. Rubalcaba ha criticado duramente al Gobierno por culpar al PSOE del retraso en la renovación del Tribunal Constitucional y ha replicado que ha sido más bien una responsabilidad del PP, que la ha «retrasado» durante cinco años a la espera de «ganar las elecciones y mejorar su correlación de fuerzas».
Renovar el TC, cuanto antes mejor
«Nosotros, antes y ahora, cuanto antes (se renueve) mejor», ha asegurado. No obstante, no ha aclarado si la renovación del Constitucional será uno de los asuntos que aborde en su reunión del viernes con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, después de que el Tribunal Constitucional haya amenazado con medidas drásticas si no se nombran los cuatro magistrados pendientes de renovación.
También se ha mostrado muy molesto por la decisión del Gobierno de cambiar el sistema de elección del presidente de RTVE y la composición de su consejo «en mitad de la renovación», ya que ahora el Gobierno podrá nombrar al presidente con su mayoría absoluta en el Congreso, sin necesidad del consenso con la oposición que imponía la mayoría cualificada. «Te vas al vestuario y cuando vuelves te encuentras con que un señor ha cambiado las reglas y dice el árbitro soy yo», se ha quejado.
No obstante, ha reconocido que contra el cambio de modelo en RTVE el PSOE no puede hacer más que votar en contra «y denunciarlo». Según Rubalcaba, el PP ha impuestos sus reglas y de esa forma se rompe la «garantía» de servicio público y de buena imagen y objetividad de la radiotelevisión pública.
Según Rubalcaba, el Gobierno también ofreció «lentejas» y hechos consumados cuando aprobó la última reforma financiera, y así se lo reconoció el ministro de Economía, Luis de Guindos, a la delegación del PSOE que se entrevistó con él la noche anterior. El decreto-ley, ha asegurado, no incorporó ninguna sugerencia de los socialistas. Y lo mismo con los Presupuestos Generales del Estado (PGE), en los que no ha aceptado «ni una enmienda».
A su juicio, la actitud del Ejecutivo, gobernando a golpe de mayoría absoluta, empeora porque para justificarse parece dispuesto a echar las culpas de todo a quien sea -PSOE, comunidades autónomas, rectores, agricultores, sindicatos o Banco de España «con tal de no dar explicaciones». «Uno no puede ir por la vida echando la culpa al Banco de España, a las comunidades autónomas, al anterior Gobierno, eso no es hacer país, es deshacer país quitándose las culpas de encima», le ha reprochado a Rajoy.
«Cariñoso bofetón» del Gobierno
Rubalcaba ha recordado también que fue él quien llamó al presidente para consensuar una posición española en Bruselas -«si no, vamos cada uno a hablar de Bruselas»-. En su opinión, la situación difícil que vive España requiere no un Gobierno que actúa en solitario y echando la culpa a todos los demás, sino «muchos acuerdos», aunque el Gobierno le responda con un «cariñoso bofetón» cada vez que los pide.
Así, se ha mostrado dispuesto a acordar y ha defendido que en su trayectoria ha demostrado que es capaz de llegar a acuerdos . Como ejemplo, ha subrayado la política antiterrorista y dice que se ‘muerde la lengua’ en pro del consenso. «Veo lo que está haciendo el Gobierno y se me ocurren una cantidad de cosas, pero no me oirán decir ni una, se lo digo al ministro en privado», ha subrayado.
En su condición de exministro de Interior, Rubalcaba no ha querido valorar el informe de Amnistía Internacional sobre la actuación policial el 15M -«uno ve cosas que le gustan más y otras menos pero he sido ministro y quiero ser prudente»-.
También ha evitado pronunciarse sobre los viajes del presidente del presidente del Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar, hasta que el CGPJ dé este jueves su opinión colectiva. Eso sí, ha afirmado que habla «mucho» con el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sobre la situación económica.