El fundador de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos, ha anunciado en un comunicado su intención de solicitar su ingreso voluntario en prisión hasta que cobren todos los inversores en pagarés emitidos por empresas del holding, y se ha declarado «el único responsable de cualquier decisión final» del grupo.
Ruiz-Mateos asegura que planteará esta petición a través del abogado Marcos García-Montes, quien, según fuentes jurídicas, llevará a partir ahora su defensa en la causa abierta en la Audiencia Nacional por presunta estafa a los suscriptores de pagarés.
El empresario gaditano señala que Banco Popular y Banco Santander son «los responsables directos de todo lo sucedido con el grupo» y, respecto a sus hijos y ejecutivos, advierte de que «pierden el tiempo», ya que él se considera «el único responsable de cualquier decisión final».
Así, afirma que pedirá su ingreso en prisión «hasta tanto cobren todos los inversionistas», que, según asegura, es «lo único que le importa».
Sin «trascendencia procesal»
Fuentes jurídicas consultadas consideraron que esta solicitud, en caso de formalizarse, «no tiene trascendencia procesal alguna».
Así, hicieron hincapié en que los inversores no han solicitado medidas cautelares de prisión y recordaron que el juez Pablo Ruz ya rechazó el ingreso en prisión preventiva de tres de los seis hijos varones del fundador de Nueva Rumasa tras solicitarlo Joaquín Yvancos, abogado del grupo durante 27 años.